Pensamientos que no estan vivos.

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Narra Elicia.

Al día siguiente tenía mucha energía, mi madre llegó y me trajo algo para desayunar, cuando acabé me fui a casa.

Me cambie de ropa en algo cómodo para volver a mi casa de la infancia. Hoy tenía pensado en descubrir que quiere decir en todo lo que me a dicho y a que se refiera en la carta.

Al pasar por el autobús, ya estaba en el bosque donde está la casa. Camine con cuidado sin caerme, lo logré y llegue a la parte trasera de la casa y entré por la puerta que deje ayer abierta. Subí las escaleras y entré en mi cuarto, aun estaba la mesa de escritorio y me senté ahí observando las vistas que me dejaban ver la ventana que tenía al frente. Habían unas montañas y colinas enfrente de la casa, a mi padre le gustaba caminar por el enorme bosque que rodea la casa, siempre lo veía acabado de venir de dar su paseo matutino por las mañanas y me levantaba. De aveces me levantaba pronto e iba con él a dar esos paseos y con Kya. Aun me acuerdo por donde nos llevaba a dar esos paseos, bajé las escaleras y salí de la casa y pase por la puerta de la vallas, y seguí el camino por donde nos llevaba. Y era por unas rocas después de pasar de la casa, y también por una casita que él hizo para unos trastos que no le cabían en casa. El primer lugar donde fui es a la casita.

La vi a lo lejos y corrí hasta estar al frente de la puerta, pero esta tiene un candado, lo bueno es que de tantos años seguramente se habrá pudrido o humedecido. Cojo una piedra bastante grande y le doy golpes al candado, tardó pero conseguí abrirlo. Abro la puerta y lo primero que llama la atención son las telarañas que hay, luego muchos trastos para el jardín o herramientas. También hay una caja en lo alto de una estantería, me levanté de puntillas y no llegaba, cojo las cajas que estaban a los lados de la estantería y me hago una escalera. Subo y la alcanzo a coger. Salgo de la casita y abro la caja, hay dibujos, muchos dibujos, de mares, océanos, islas y cajas del tesoro. También de un niño y una señora que deduzco que es mi madre. Seguramente que él será mi hermano, por lo que sé. La cerré y también cerré la casita, y continúe caminado por donde era el paseo, faltaba poco para llegar a las rocas donde me encantaba subirme por ellas.
Di dos pasos y las tenía al frente mío, algo que no se podía pasar por alto era el gran dibujo que estaba en la roca. Hubiera cogido el móvil y hubiera echado una foto. Pero no lo tenía, y al recordar el porqué y cómo, me dieron ganas de abrazar a Joss. Y ya no sé que estoy pensando, ya no tengo pensamientos vivos, en todo lo que pienso son en personas muertas o que están apunto de cruzar la línea. Aparte ese pensamiento de Joss, y cojo uno de los dibujos de antes y por detrás y con un rotulador que había traído empiezo a copiarlo que es un descampado con unas ventanas en los edificios de a los lados.

Ya se estaba haciendo oscuro, cuando acabé el dibujo. No dibujo mal, es más dibujo muy bien, y me gusta que queden las cosas bien dibujadas y puedo tardar mucho. Al final me quedó muy bien. Pero ya no me daba tiempo de continuar el paseo de papa, di media vuelta y camine en dirección a la parada de autobuses.

Pase por delante de mi casa de la infancia y pare un momento y bebo agua. Y continúe caminado hacía la parada de autobuses.

Al llegar no había ninguno, pasaron minutos y minutos, una media hora, y se hacía más oscuro. Ya seguro que ya no vendría, pero vi una luz, era corta pero era una luz.
Pasó por delante y era una moto, pensé que era Joss, pero no podría ser él. Después de la moto paso el autobús. Subí y di mi dirección, pero esta vez la del hospital.

Entré a la habitación de Kya y mi madre estaba dormida. Le deje mi bocadillo en la mesita con mi botella de agua, de seguro que no habrá comido. Le doy un beso a mi hermana y salgo de la habitación. Camino desde el hospital a mi casa, me preparo algo para comer y luego subo las escaleras me doy una ducha y me pongo el pijama. Un pantaloncillo corto que deja ver parte de mi trasero azul con una blusa ancha pero a la vez apegada, azul con una chaqueta fina de seda también azul. Abro la luz y me siento en mi escritorio, pongo la carta en la mesa y la estiro bien, también dejó en la mesa todos los dibujos. Voy al cuarto de Kya y cojo unos marcos de churo, tiene cinco, unos cuantos con unas fotos, se las quito y me lo llevo a mi cuarto, los cuelgo en las paredes. Bajo a bajo al sótano y cojo unas pizarras de pie que usaba mi madre para un trabajo de cocina, las llevo y bajo de nuevo, cojo celo, libretas y materiales importantes y lo subo todo a mi cuarto.

Cuando la noche llega.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora