.THE LUCK OF MY LIFE.

Capítulo 3.

Eran ya las nueve de la noche, así que empecé a preparar la ensalada. Mire otra vez mi móvil ilusionada, la verdad, de poder haber recibido un mensaje de Niall, pero no fue así, en fin, solo fue una tonta conversación. Prepare la mesa para mi y me senté a cenar mi riquísima ensalada de pasta que me supo a gloria bendita, ya que llevaba desde las ocho de la mañana sin probar apenas bocado. Acabe de cenar, recogí toda la cocina y me senté en el sofá a repasar los apuntes que había cogido ese día. Eran  la cerca de las doce y Lucia no había aparecido.

-         Se habrá quedado a dormir con Tom.*Pensé en voz alta.

Cogí los apuntes, les guarde en la mochila y me fui a la cama. Mire el móvil para poner la alarma y me fije, no, no tenia ningún mensaje.

Me desperté sobresaltada al oír la alarma, había tenido una pesadilla, pero ya no me acordaba de que trataba. Puse la música a todo volumen y me metí a la ducha. Al salir, me puse unos vaqueros ajustados, unas botas y un jersey de lana que me había hecho mi abuela, me maquille un poco y me recogí el pelo en una coleta. Entre a la habitación de Lucia para ver si estaba ahí, pero no, lo que yo suponía, se quedo con Tom. Baje a la cocina y me prepare un tazón de leche. Justo llamaron al timbre, supuse que era Lucia, que venia a por los libros para ir juntas a clase, pero al abrir la puerta mis ojos no daban crédito. Niall Horan enfrente de la puerta del piso con una caja de mis cereales favoritos. Estaba alucinando.

-Mmm, mmm, hola. *Dije como si tuviera problemas para decir una palabra junta.

-Hola mmm, ¿como te llamas?, no se ni tu nombre.*Dijo mientras le notaba que le salía una risa flojita.

-Laura, me llamo Laura, ¿y tu?. *Cuando esa pregunta me salio de la boca me sentí como una completa estúpida. ¿Quién no iba a saber quien era y como se llamaba?.

-Bonito nombre, si. ¿Enserio me preguntas por mi nombre, Laura?.*Dijo mientras reía como un poseso. Su risa era contagiosa y no pude frenar el reírme nerviosa.

-Gracias, ya, vaya pregunta más tonta. Encantada Niall.

-Igualmente. Bueno que estaba de paso y ya pues te traigo yo en mano los cereales que me quede.

-Ah, vaya, muchas gracias, espero no haber sido una molestia. *Dije mientras le regalaba una sonrisa de agradecimiento.

Oh, no, ninguna tranquila y bueno, ¿ya has desayunado?

-Eh, pues no la verdad, estaba ahora mismo preparándome el desayuno.

-¿Si?, pues, ¿a que me invitas a desayunar? Esque he salido rápido de casa y no me ha dado ni tiempo. *Dijo con carita de niño bueno.

Yo estaba tan nerviosa que me quede como 10 segundos en shock. ¿Niall y yo, desayunando juntos? Ya, reaccione al darme Niall un chasquido de dedos en frente de mis narices.

-Eh, eh, vale, si, si quieres. Pasa. *Le dije mientras le dejaba pasar.

-Gracias, te sigo hasta la cocina.

Estaba sentado y yo preparando otro tazón de leche. Estaba muy nerviosa, se me habría podido caer todo encima, pero no paso.

-¿Oye, no te preguntas porque tengo tu numero de teléfono?

-Ah, es verdad, mi número. ¿Cómo le has conseguido?* Pregunte intrigada

-Pues, cuando estabas de puntillas se te callo un papel al suelo, y cuando le cogí, ya te habías ido. Había un número y me arriesgue a mandar un mensaje y efectivamente, era tu numero.

-Ah, ya se. Esque llevo aquí en Londres tres meses, y al cambiarme de numero, pues apunte el nuevo en un papel porque no me le sabía. *Le dije con una sonrisilla tonta.

Nos sentamos y estuvimos comiendo los cereales y hablando un poco sobre el grupo, lo que van a hacer este año y eso. Cuando mire el reloj, no podía ser, eran las 08:15, y yo entraba a clase a y media.

-Joder, joder. *Solté como si nada.

-¿Qué pasa Laura?* Dijo en un tono de voz preocupado

-Voy a llegar tarde a clase. Entro dentro de un cuarto de hora y tardo media hora en llegar. *Dije mientras dejaba la taza en la fregadera.

-Ah, vale, tranquila, te llevo en coche y punto, llegaremos enseguida. ¿Dónde estudias?

-En la universidad de derecho, la de la plaza norte. Pero no, tranquilo, cojo un taxi y punto, gracias de todos modos.* Dije sonriendo agradecida por la propuesta.

-No, no, no,  no puedo permitir que por mi culpa llegues tarde y te pongan retraso.*Dijo entre risas.

Me agarro de la mano, cogió mi mochila y me arrastro hasta el ascensor. Esto era increíble, pero cierto. Bajamos el ascensor y me metió al coche, que estaba aparcado justo en la puerta del edificio. Me subí y le indique por donde era.

-Entonces, ¿estamos ante una futura abogada no?

-Si, si todo me va bien supongo que si.

-Pues si tengo algún problema con la ley, ya se a quien llamar. *Dijo entre risas, pero sin apartar la mirada de la carretera.

-Claro, te debo una. *Dije sonriéndole

-Bueno, ya hemos llegado Laura. Un placer. Ya nos veremos espero. *Dijo mientras salía del coche.

¿Ya nos veremos espero? ¿Niall me dijo eso?. Estaba flipando, literalmente. Me sonroje y le respondí.

-Eh, si. Bueno, me voy que llego tarde. Muchas gracias por traerme. *Dije sonriendo, roja como un tomate.

Salí corriendo, cerré la puerta del coche y me metí corriendo a las clases.