Mi primer error

Capitulo 11 *corto*

JULI BAKER
Al ver a Bryce Loski frente a mí, no supe que hacer, un escalofrío sacudió mi cuerpo, el destino me estaba jugando una mala pasada.
Por otro lado, Madison resultó ser nada más y nada menos que la novia de B, como le decían sus amigos.
Lukas fue todo un caballero, sus hermosos ojos color negro profundo, y su cabello castaño, ahg, me mataban.
Lo más incomodó de la noche, es que pensaron durante toda la noche que eramos hermanas, o es mas, mellizas, sobre todo Bryce, que no dejo de mirarme durante la fiesta.
Pero el ya había salido de mi vida hace rato, así que no volvería a caer en sus increíbles encantos.

Traté de disimular, pero me era casi imposible, de vez en cuando una risita coqueta salía, y esperaba que no fuera gracias a el.

Mientras Lukas y yo estabamos al ritmo de la musica, Bryce y su novia nos observaban desde una esquina.

Lukas me tomó por sorpresa tomando mi cintura, y me dio un beso fugaz, se notaba que era bueno en eso.
No le quería seguir el beso, así que la única solución fue separarlo suevemente, y que no se diera cuenta del verdadero motivo.

Pero después, todo se convirtió en una guerra de besos, Madison y Bryce, se besaban con pasión y fuerza, pero se notaba que realmente se querían.
Igualmente ya lo sabía, el me olvido hace mucho tiempo, pero lo que no voy a negar es que yo no a el, y ese hermoso sicomoro, siempre lo cuide, aunque ahora está a cargo de mi madre.

Al principió todo fue incomodó, así que le pedí a Lukas que nos fuéramos a casa.
Aproveché que estaba en el baño, y fui a mirar, que era lo que hablaba su hermana, pero al intentar entrar, pensé en el cargo de conciencia que me llevaría, además, no es de mi incumbencia lo que el haga o deje de hacer, aunque a lo lejos, vi un gran cuaderno, una pizarra, y un lienzo, pero en realidad no sabía de que se trataba.
El que se suponía estaba en el baño, me tomó otra vez por la cintura, pero esta vez me empezó a dar besos en el cuello, y me comenze a enfadar, ¿que se creía? Con tan solo 1 semana y media de concernos, ya quería parecer mi novio.
-Estoy cansada, iré a dormir.-Retire sus manos de mi cuerpo, y su cabeza de mi cuello.
-Eh, claro.- Mientras susurró "¿Claro? Que estúpido.", y lo logré escuchar.
La noche estaba fría, y un buen libro ayudaría, pero no tenía ánimos de nada, simplemente mirar a la ventana, y pensar de lo que habría sido, si le hubiera guardado ese primer beso, a mi primer amor.