Me desperté por el ruido de la lluvia golpear en la ventana de mi habitación, era sábado y hoy no había instituto así que tendría todo el día para ir de compras con las chicas, me levante y la lluvia parecía que no iba a parar hasta un buen rato, me senté en la cama mirando el reloj, valla eran las 11 de la mañana y no había mucho sol por la mierda lluvia, me puse de pie y camine hasta la puerta de mi habitación, baje las escaleras con pereza y entre en la cocina, mis padres estaban sentados desayunando un bol de cereales, me acerque a ellos para darles los buenos días con un beso a cada uno y me senté en la mesa con ellos, me serví un poco de cereales y me los comí mientras observaba por la ventana de la cocina como la lluvia caía y dejaba huella en el cristal, mis padres se levantaron y se despidieron de mi con un beso y salieron de casa volando ya que sino no llegaban a trabajar, solo quedábamos mi hermano y yo, así no os he hablado de mi hermano, se llama Erik Anderson Smith y tiene 21 años y está trabajando como periodista, él y yo somos muy unidos, si vale, de vez en cuando nos peleamos pero siempre compartimos opiniones y nos llevamos demasiado bien se puede decir, el lleva un tiempo sin hablar con nuestro primo Liam por el comportamiento que tiene hacia las personas sobre todo a las chicas, es un total cabron como dice mi hermano, yo sé que es un cabron pero sé que ese cabron no es el Liam que conozco cuando estamos solos, la edad lo pierde. Me levante de la silla de la cocina y puse el bol en la pica, salí de la cocina dirigiéndome a despertar a mi hermano, tenía ganas de pasar la mañana con él, subí las escaleras y entre en el cuarto de mi hermano sin hacer mucho ruido, me acerque a su cama y me senté encima suyo, él se movió incomodo
Sara: burro, despierta, hace un día de fábula, vamos al centro- mentí un poco
Erik: Sara no me des la tabarra y vete de mi cuarto, estoy cansado- me tiro un cojín
Sara: vamos Erik, quiero pasar la mañana con mi hermanito guapo, acaso no quieres que compremos muchas cosas, mama me ha dejado la tarjeta de crédito- el levanto la cabecita un poco
Erik: te ha dejado la tarjeta o se la has quitado?- reí al escuchar su comentario
Sara: las dos cosas- se sentó en la cama
Erik: bueno pues si te la ha dejado, tendremos que aprovechar no?- sonrío de oreja a oreja
Sara: te espero en 10 minutos en el salón, no tardes burro- camine hasta la puerta y salí de su habitación
Me dirigí hasta mi habitación y me acerque hasta mi armario y lo observe con una sonrisa, esta mañana lo llenaría de nuevo de ropa y de zapatos está claro, al final me decidí por unos pantalones vaqueros ajustados y una camiseta de lana negra con puntos blancos junto con unas botas de tacón, abrí la puerta del baño y me puse en frente del espejo, me lave la cara y los dientes y cepille mi pelo marrón con mechas rubias, me mire y me faltaba algo, ostia ya se, el maquillaje, me pinte la raya de los ojos y las pestañas, un poco de perfume y lista, salí de mi habitación y baje hasta el salón esperando a que mi hermano este allí. Cuando baje esas escaleras que me encantaban subirlas y bajarlas me encontré con un chico de estatura no muy alta vestido con unos vaqueros un poco ajustados y una camiseta de V que me encanta como le queda con su chaqueta de cuero y su pelo de punta y sus ojos verdes que me encantan, si no fuera mi hermano estaría ligando con él pero tengo novio y le soy fiel, bueno tampoco os dije que tenía novio, pues si, se llama Alex y es mayor que yo, tiene 20 años y trabaja en un bar de camarero, se puede decir que es un cabronzete porque la lía demasiado, pero yo lo quiero porque yo sé que es buena persona, los dos años que llevamos juntos han sido de los mejores pero ha habido de peores, pero la vida sigue y nosotros también. Salimos de casa cerrando con llave y la lluvia seguía
Erik: me seguiste que hacia un tiempo de “fabula”- hizo camillas en la última palabra
Sara: si no lo decía no venias- sonreí- sube al coche anda que nos cierran el centro comercial.
Erik se sentó en el asiento del piloto y yo en el del copiloto, puso el coche en marcha y nos dirigimos hasta el centro comercial de Londres. Llegamos y estaciono el coche en el parquin del centro, menos mal que el parquin era bajo tierra porque si no nos mojaríamos con la lluvia, bajamos del coche y entramos dentro del recinto, subimos por las escaleras automáticas y llegamos a la zona de ropa, Erik se fue a la zona de chicos y yo a la de chicas, pasee por los pasillos asombrada de la ropa nueva que había venido, me puse a coger ropa como loca y fui hasta el probador.
ESTÁS LEYENDO
Un cabron tambien se enamora
FanfictionDime, que pasaria si un dia, tu corazon se empieza a enganchar al chico mas cabron del colegio, a uno de los mejores amigos de tu primo...al chico que sin darse cuenta, no es tan malo como piensan todos. Sara Anderson aparte de ser normalita, cuando...