Todo me daba vueltas y cuando por fin conseguí entrar en razón Clara estaba pegándole a uno de los tres chicos de antes.
Al mediano.C: ¡¿¡¿DYLAN TE CREES QUE ES GRACIOSO NO?!?!
¿LE PEGO YO A TU PUTA MADRE O COMO VA LA COSA?Dylan era el mediano, el chico de ojos grises. El que más me hirió.
D: Pues yo me parto viendo a la albondiga esta rodando por el suelo 😂
Ese tal dylan se fue con los otros dos chicos y Clara corrió a mi lado y me ayudó a levantarme. Yo a penas podía moverme, solo lloraba y me tocaba la sangre que me salía del labio y del pómulo.
Clara me llevó a mi casa. Mi madre me preguntó pero le mentí diciendole que no sabía quien había sido. No quería problemas.
Clara subió conmigo a mi habitación y empezó a curarme. Me sonrió un poco y me dijo que si quería pedir una pizza. Yo, volviendo al tema de siempre (la comida y lo que pensara la gente) le dije que no. Que no me apetecía cenar
Ella no me hizo ni el menor caso, le pidió permiso a mi madre y pidió la pizza. Cuando llegó yo seguía apenada, con lágrimas en los ojos y algo decaída.
C: Ainhoa... no quiero verte así...
A: vale...
Le sonreí un poco como pude
Ella cojió un trozo de pizza y se lo comió.
Sin dejar a un lado mi rutina de escribir en mi cuenta de instagram lo hice.
Escribí todo mi día en una foto algo oscura y borrosa y la subí. Puse tanto lo de la paliza como lo de que había perdido a mi príncipe azul por unos gilipollas que habían roto el número que me dió.
Al poco rato me llegaron un montón de comentarios invitándome a denunciar a esos chicos y a contarlo todo a mi madre, sin mentiras, sin esconder nada.Yo, repito, no quería problemas así que no respondí a los comentarios y me limité a comer pizza con Clara.
Era tarde. Exactamente las 23:47 y no podía permitir que Clara se fuera sola a su casa. Le dije que se quedara conmigo a dormir y ella accedió regalándome otra de sus cálidas sonrisas.
Me puse el pijama y le dejé uno a Clara, ya que lo de quedarse a dormir a mi casa le pilló de imprevisto y ella no tenía pijama.
Recogimos juntas la caja de pizza y todo lo que pusimos por medio. Estuvimos charlando un rato y después nos quedamos las dos dormidas...
ESTÁS LEYENDO
TRAICIÓN
RomanceBueno, por dónde empezar. Me llamo Ainhoa, tengo 17 años y antes iba a un instituto del centro de Teruel. Llevo desde los 3 años viviendo aquí y no es que esté muy a gusto, la verdad. Siempre se han metido conmigo por el tema de mi peso ya que no e...