Soulmates - {Lauren Jauregui y tú}

Capítulo 19: "Siempre voy a estar a tu lado"

"Y es que el amor no necesita ser entendido, simplemente necesita ser demostrado"- Paulo Coelho.

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Narrador Omnisciente:

Luego de que Lauren y ______ terminaran de besarse, la chicas ayudaron a la ojiverde a pararse y la llevaron al camerino de la Girl Band para que pudiera descansar un momento. Lauren no se negó a ir pero le rogó a ______ que se quedara con ella, la cual aceptó al instante. Camila, Dinah, Normani y Ally no querían interrumpir ese hermoso momento que hasta ellas habían esperado, así que salieron de allí dándole más privacidad a ______ y a Lauren.

______ ayudó a Lauren a recostarse en el sillón que había en el camerino y luego se acercó a una silla que estaba al costado de éste con la intención de sentarse allí, pero Lauren insistió en que se recostara junto a ella. La latina no se pudo resistir a su puchero y a sus lindos ojitos, así que terminó por aceptar la petición de la ojiverde. Apenas ______ se acomodó en el sillón, Lauren apoyó su cabeza en el pecho de la latina abrazándola por la cintura y la chilena comenzó a acariciar su cabello. Se quedaron en silencio, disfrutando sólo de la compañía de la otra. Pero luego de un rato la ojiverde habló.

- Gracias – soltó de repente mientras trazaba figuras con su dedo índice en el abdomen de la otra chica.

- No tienes por qué agradecer – dijo _____ y Lauren levantó su cabeza para mirarla a los ojos.

- Sí, debo agradecerte. Porque nadie sabía qué hacer y tú llegaste y me ayudaste sin importar qué. Me hablabas como si nunca te hubiera rechazado e ignorado, como si nunca hubiéramos dejado de hablar, como si nunca... como si nunca te hubiera herido – susurró y sus ojos comenzaron a cristalizarse al igual que los de la latina.

- Eso ya no me importa, lo dejo en el pasado. Lo único que me importa ahora es poder estar contigo – dijo besando la frente de la ojiverde – y escúchame bien, siempre voy a estar a tu lado, pase lo que pase. Así esté al otro lado del mundo, siempre estaré aquí cuando me necesites – dijo para luego tomar el rostro de Lauren y besarla.

- Me encantas – soltó Lauren luego de que se separaran del beso.

- También me encantas – dijo _______, y esta vez Lauren tomó la iniciativa para besarla. Se separaron por falta de aire y después de eso _______ comenzó a dejar pequeños besitos por el rostro y el cuello de la ojiverde, haciéndola reír.

- ¡Basta ____! ¡me haces cosquillas! – decía Lauren mientras reía.

- Bueno, bueno. Ya veo que no te gustan mis besos – dijo ______ mirándola con cara de cachorrito abandonado.

- No es eso bebé – dijo tomando el rostro de la chilena y besando su puchero – es sólo que me hacías cosquillas – comentó sonriéndole.

- Bueno, bueno – soltó la latina volviendo a acariciar el cabello de la ojiverde. Volvieron a quedar en silencio por unos minutos, y ésta vez fue la chilena quién lo interrumpió.

- ¿Por qué te alejaste de mí? – preguntó tranquila tratando de que la ojiverde no se sintiera atacada con aquel pregunta. Lauren sabía que algún día ella iba a preguntar eso, pero no pensó en que sería tan pronto. La ojiverde levantó su cabeza, la miró, dio un largo suspiro y comenzó a hablar.

- Fue por mi mamá. El día que nos encontró besándonos, me obligó a ir a casa, no habló en todo el camino y una vez que llegamos, discutimos. Ella estaba decepcionada de mí por elegir a una mujer, cuestionó mi preferencia sexual, se negaba a creer que yo era lesbiana, ella me decía que debía salir con chicos no con chicas. Le dejé claro que me gustabas pero ella no entendió. Entonces su única solución fue obligar a que me alejara de ti. Así que por más que doliera, debía alejarme de ti. Si no lo hacía, mamá me sacaría del programa. Espero que comprendas mis razones – explicó triste Lauren y ______ no dudó en abrazarla.

- ¡Dios eso es horrible Lau!, si hubiera estado en tu lugar probablemente habría hecho lo mismo. Y tranquila, sé que has esperado mucho por una oportunidad como ésta, sé que es tu sueño, sé que es lo que amas, sé que es lo que quieres hacer por el resto de tu vida y sé que estás destinada a esto, nunca sería capaz de arrebatarte algo que es tan importante en tu vida – dijo con dulzura la chilena.

- Lo sé, sé que nunca lo harías. Pero tenemos un problema – comentó la ojiverde y la latina la observó confundida – ahora tú también eres importante en mi vida _______ – declaró Lauren y se acercó para besarla con mucho amor. Una vez que separaron sus labios, Lauren juntó sus frentes mientras volvía a hablar – te prometo que haré algo para que podamos estar juntas, para que podamos ser felices sin tener que preocuparnos de que nos puedan separar. Hablaré con mi familia, al menos sé que papá nos apoya después de todo. Con mamá lo intentaré una vez más y si no razona, me iré de la casa si es necesario, pero dejarte y dejar mi sueño no es una opción – mencionó decidida.

______ iba a contestar pero una voz la interrumpió.

- Eso no va a ser necesario cariño – dijo alguien desde la puerta haciendo que ambas chicas se sobresaltaran y se separaran rápidamente.

- Mamá yo...– susurró Lauren pero Clara la interrumpió.

- No tienes que explicar nada hija. Escuché todo. Y también vi cuando ella – dijo mirando a la chilena – te ayudó con tu ataque de ansiedad, fue muy tierno y estoy muy agradecida que la ayudaras – dijo sonriéndole a ______ – Nunca vi que alguien te pudiera ayudar a controlar tu ansiedad tan rápido – comentó ahora dirigiéndose a su hija. Clara calló un momento y continuó hablando – cuando las vi juntas me di cuenta de cuan equivocada estaba. Ella te hace feliz cariño, te hace realmente feliz y yo te estaba privando de ello. Debes entenderme hija, no fue fácil para mí descubrir que te gustaban las chicas de esa forma – explicó refiriéndose al beso – yo siempre imaginé que el día de tu boda estarías acompañada de tu príncipe azul, imaginaba cómo sería estar contigo en el hospital cuando tuvieras a tu primer hijo, alucinaba con verte crear una gran familia junto con tu esposo. Tenía en mi mente todo tu futuro hecho y eso estaba mal. Nunca consideré el que no te gustaran los chicos y nunca pregunté qué es lo que realmente querías. Fue mi error y quiero que me perdones por eso. No sé qué estaba pensando cuando te pedí que te alejaras de ella. Fue algo muy egoísta ya que no pensé en tu felicidad. Trataba de protegerte de lo que la gente fuera a decir, pero al hacer eso, no me di cuenta que yo te estaba haciendo mucho más daño que ellos – se acercó a ambas chicas y tomó sus manos para luego seguir hablando – me gustaría pedirles disculpas a ambas. Las hice sufrir y eso está horrible. Espero que puedan perdonarme – finalizó Clara botando algunas lágrimas al igual que su hija. Las chicas se miraron entre sí y cómo si estuvieran conectadas, se lanzaron arriba de Clara y la abrazaron.

- Bueno estaría de más decir que ahora tienen mi apoyo, ¿no? – mencionó riendo – quizás me cueste un poco acostumbrarme a verlas juntas pero si ustedes son felices, yo estaré feliz – dijo y les sonrió.

- Gracias mamá, te amo – dijo Lauren abrazando nuevamente a su madre.

- De nada mi amor, también te amo – soltó correspondiendo su abrazo y besando su frente – y _____, ¿Lau ya te pidió ser su novia? – preguntó curiosa y la chilena se sonrojó.

- ¡MAMÁ! – regañó Lauren a Clara causando que ______ y su madre carcajearan.

Lauren estaba contenta de que su madre por fin haya podido entender que no era necesario estar con alguien del sexo opuesto para ser feliz.

El amor es lo que nos hace vivir, reír y bendecir lo que nos rodea, es por eso que todos los seres deseamos experimentarlo en todas sus manifestaciones, entre ellas como amor de pareja. En todo el universo es igual, cada alma tiene su contra parte que lo hace sentirse completa y que la hace vibrar con sentimientos indescriptibles.

Todos nosotros, sin excepción, tenemos a ese alguien que nos espera, pero es muy importante que sepamos que nadie nos podrá decir dónde está o quién es. Ésa es una misión que sólo nuestro corazón puede cumplir, sólo él podrá respondernos si esa persona que nos ha enamorado es en realidad nuestra otra mitad.

El amor no entiende de edad, de sexo o de raza, sólo se da y ya.

Nunca escondas tus sentimientos por miedo a lo que diga la gente, pues el amor es demasiado hermoso para ser escondido en un clóset.