NO QUERÍA ENGAÑARTE →JICHEOL

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Su teléfono sonó en medio de la madrugada, avisando que un nuevo mensaje habia llegado.
Descubrió su rostro y estiró el brazo hasta que consiguió tomar el aparato con sus cansadas manos y cuando lo tuvo enfrente encendió la pantalla, lastimando sus ojos por el potente brillo.

Jihoon miró con atención el nombre del remitente de ese mensaje; su marido, Choi Seungcheol. El miedo y la vergüenza inundó su ser, así que rápidamente desbloqueo el teléfono para ver el contenido.

"Seungcheol:

Amor, voy llegando a casa y necesito que me ayudes con algunas cosas que traigo del viaje :c
Espero que cuando llegue no estés enojado, te amo ♥♥♥"

El pequeño se alarmó al terminar de leer el mensaje y se levantó rápidamente de la cama, sin importarle que la persona que dormía a su lado quedará completamente descubierto, mostrando su desnudez.

—¡Oye!—El chico que habia sido despertado de forma brusca se quejo al sentir el frío viento golpear en su parte intima—¿Que demonios te pasa Jihoon?—Trato de buscar la sabana nuevamente, pero su novio lo detuvo con un golpe en la mano—

—¡Ni se te ocurra volver a dormir de nuevo!—El grito lo alarmó, así que abrió lo ojos lo mas que sus párpados lo permiten. Se sentó en la cama y miro como el pequeño pelirrosa iba y venía por la habitacion—

—¿Qué te pasa?—Se levanto y camino lentamente hasta llegar a donde estaba el mayor casi haciendo un hoyo en el piso. Lo detuvo tomando su cintura y pegandolo a su desnundo cuerpo; el menor aún permanecía sin ropa, así que le era mas fácil sentir el contacto piel con piel—

—Min...por favor—El pequeño se estremeció al sentir el cálido cuerpo de su amante cubriendo el suyo. Lo sentía tan bien que no deseaba separarse nunca de él—Cheol viene para acá y...—Fue interrumpido por el sonido de llamada del celular. Vio la pantalla a lo lejos; su esposo lo estaba llamando—

—Maldita sea—Escucho susurrar al mas alto cuando se separó por completo de él. Se acercó con lentitud al aparato, deseando que el insistente sonido de llamada acabara—¿Vas a contestar?—Giró para mirar a su amante. Se estaba vistiendo rápidamente, sin mirarlo—Yo ire a ordenar el salón en lo que tu te vistes y respondes el mensaje de ese estúpido—El teléfono por fin dejó de sonar y Jihoon miró al chico que se disponía a salir de la habitacion—

—No lo llames así—Su voz sonó fuerte y amenazante, a pesar de eso pudo escuchar la risa del menor—Ten un poco de respeto por él...

—Jihoon, tu menos que nadie tiene derecho a hablar sobre respeto hacia mi hermano...

Porque si, Jihoon estaba tan necesitado que se acostaba con el hermano menor de su marido.