1/3

2.1K 120 8
                                    


Advertencia: mención a intentos de suicidio y shota.

Los personajes no me pertenecen (¡y a ustedes tampoco!)

...

...

...

A) Apapachar

Los dedos paseándose tranquilamente por su cabello lo relajaban, los rítmicos latidos formaban una letanía que no se cansaba des escuchar, alzo la vista topándose con esa sonrisa que lo había cautivado hacía tiempo e inevitablemente la correspondió antes de murmurar un sincero te amo.

–También te amo Kon –un beso en la mejilla– mucho.

Suspiro rodeando la cintura de su amante recostando otra vez sobre su pecho le fascinaban esos momentos en que solo eran ellos dos sin ningún villano intentando dañarlos, sin mascaras ni responsabilidades.

B) Beso

Si alguien le preguntaba Damian diría que su primer beso había sido a los doce con P. Parker por un "experimento sobre la afectividad y desarrollo de vínculos emocionales" pero realmente la primera vez que sus labios se unieron a los de otra persona fue cuando solo tenía siete años y era un suceso que deseaba olvidar.

Durante una de las épocas en que vivió en Londres con su madre escapo de la vigilancia que Ubu tenía sobre el (algo no muy difícil puesto que el tipo se distraía con cualquier falda corta) caminaba tranquilo por un parque hasta que un cachorro llamo su atención así que lo siguió. Lo encontró en posesión de un hombre de aspecto amable que lo invito a sentarse junto a él y jugar con el perrito, el no vio peligro y se acercó. Acaricio el pelaje marrón del animalito un rato cuando de pronto el tipo lo beso así sin más, Damian se asqueo e intento separarse pero lo sujeto evitándolo. El miedo comenzó a correr por sus venas y no era como el miedo que sentía cuando iba al dentista sino como el que le daba "volar" y que el cable de su garfio se rompiera; no le gustaba para nada la situación y como el tipo no quería soltarlo lo haría hacerlo a la fuerza. Rápidamente saco la daga que siempre llevaba consigo y apuñalo a su atacante en el abdomen, no fue en un punto mortal pero le daría el tiempo suficiente para correr y buscar a Ubu quien al parecer nunca se dio cuenta de su ausencia.

–Es hora de irnos lord Damian –el no dijo nada solo asintió levente mientras miro alrededor con disimulo para detectar la presencia del atacante pero no lo encontró. Ya más tranquilo siguió los pasos del guardaespaldas.

Definitivamente quería olvidar ese día.

C) Cicatriz

Las cicatrices eran parte de su piel desde siempre, realmente no podía recordar como lucia su cuerpo sin esas marcas aunque suponía que hubo una época en que fue lisa, cada marca guardaba una historia. Como la de su espalda que hablaba de la ocasión en que debieron reemplazar su dañada columna por una nueva o las de su torso que significaban una autopsia y multi trasplante de órganos.

Los cálidos labios de su amante besaban con adoración cada milímetro de tejido cicatrizado, las líneas blancas algunas finas como un cabello otras mucho más gruesas resaltaban de sobremanera en la bronceada piel, aunque no solía hablar mucho de ellas Damian apreciaba sus marcas, eran muestra de los golpes que había recibido de la vida y superado.

En las tardes tranquilas que descansaba dejando su mente vacía de las preocupaciones que le acarreaba Wayne Enterprise o ser Ghoul su amante aprovechaba su guardia baja para dibujar cada cicatriz con los dedos o con los labios una y otra vez como si intentara desvanecerlas junto con lo que las causo pero a pesar de sus esfuerzos seguían ahí, recordándoles a ambos la fragilidad del menor. Que a pesar de ser uno de los mejores súper héroes seguía siendo humano, que algún día una herida no lograría cicatrizar y seria la que finalmente le arrebataría la vida.

ABC KonDamiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora