Alec se había quedado prácticamente toda la noche mirando el papel con el numero telefónico del chico, del cual, ni siquiera sabía el nombre, pensando si seria correcto llamarlo, quería llamarlo eso seguro, pero le daba nervios, ¿y si no era lo que el esperaba? ¿y si se quedaba en blanco y no sabia que decir? Al final, se quedo dormido con el papel entre sus dedos.
(…)
Hoy era Jace el que descansaba, y obviamente había hecho planes con aquella peliroja, Alec y Isabelle caminaban por las largas calles, hacia algo de frio y isabelle no había traido abrigo, asi que llevaba la chaqueta de Alec
-hermano ¿paso algo interesante ayer en la cafetería? –pregunto Isabelle, la cual había notado a Alec bastante distraído desde que había vuelto el dia anterior, este la volteo a ver por un momento y luego volvió su vista al frente
-no, nada nuevo- se limito a decir, y por sorprendente que fue para el, Isabelle decidio dejar el tema, llegaron a la cafetería y ambos se cambiaron, Alec volvió a su puesto tras la caja registradora y Isabelle comenzó a limpiar las mesas, aunque insistia en que quería trabajar en la cocina, nadie la dejaba, y ella ya se había resignado a eso, poco a poco las personas comenzaron a llegar y Alec logro distraerse un poco, y dejar de pensar en el chico de lentillas de gato.(…)
Magnus no estaba muy seguro el que hacia caminando hacia la cafetería, si el chico de los ojos azules no le había llamado, era porque no quería nada con el ¿verdad? Pero Magnus no se daría por vencido, almenos no, hasta no escuchar una respuesta concreta de parte del peli negro, asi que entro a la cafetería, pudo notar que habían bastantes personas, pero aun asi habían algunas mesas libres, aunque sus ojos inmediatamente se posaron sobre el oji azul, que estaba recibiendo el dinero de unas chicas, una sonrisa se dibujo en los labios de Magnus al verle, el cual comenzó a caminar y finalmente se sento en una de las mesas al lado de la ventana, algo decepcionado de que el pelinegro no lo hubiera notado.
-Buenos Dias ¿Qué deseas? –escucho una voz femenina, al levantar la mirada se encontró con una chica de ojos marrones y un cabello largo y negro, bastante guapa tenia que admitirlo, y una amplia y hermosa sonrisa, pero, Magnus noto cierto parecido en ella con el chico por el que venia
-quiero un café- antes de que la chica se fuera el la detuvo, a lo que ella lo miro algo confusa- disculpa, pero podrias darme el nombre del chico que trabaja con tigo- ella se vio sorprendida por un momento pero luego sonrio sin dejar de verle
-hablas del rubio?- pregunto amablemente mientras le miraba, y Magnus negó rotundamente
-no, de hecho hablo del de los ojos azules-señalo la caja registradora e isabelle volteo a ver a su hermano, el cual se encontraba distraído, ella sonrio amplio y volteo a ver a Magnus
-su nombre es Alexander, pero llámalo alec- ella le guiño un ojo sonriendo mientras se alejaba de el, el sonido de los tacones que usaba resonaba por todo el lugar, ella fue a la cocina a pasar las ordenes pero luego se acerco a Alec, antes de poder decir algo a cerca de lo que acababa de pasar se escucho el ruido de la puerta y ambos miraron hacia esta, era un hombre con un abrigo largo, con ambas manos en los bolsillos, las personas de la cafetería le ignoraron, excepto Magnus y Alec, a los cuales no les daba buena espina por alguna razón, Isabelle tomo el café y lo llevo a la mesa de Magnus, mientras tanto el hombre en vez de ir en busca de una mesa entro por el lado en el que estaba Alec, quedando a su lado detrás de la caja registradora, Magnus no les quitaba los ojos de ensima, mientras que Alec le miraba confundido
-escucha, lo siento pero no puedes estar aquí-fue lo que dijo, noto como el hombre saco la mano de su abrigo, y en esta tenia un arma, Alec se tenso completamente pero no hizo o dijo nada mas, el hombre señalo la caja registradora indicándole que le diera el dinero, y en ese momento Alec agradecia que su madre le hubiera inscrito desde muy pequeño en clases de combate, asi que ágilmente ataco al hombre haciendo que este soltara algunos disparos, las personas salieron rápidamente de la cafetería, Magnus tomo a isabelle para que esta no corriera al lado de su hermano, el cual había logrado quitarle el arma al hombre, este se levanto del suelo y se fue rápidamente del lugar, Magnus llegaron al lado de Alec en cuestión de segundos con cara de preocupación, el solto el arma y suspiro mientras los miraba a ambos, pero su mirada se poso sobre Magnus, el cual vio que Alec estaba sangrando
-al parecer logro dispararte-dijo mientras se acercaba para poder ver la magnitud de la herida
-llamare una ambulancia-dijo Isabelle con los pelos de punta sin apartar la vista de ellos
-no, no lo hagas, mi amiga es doctora, y me ha enseñado una o dos cosas, si no les molesta, puedo curarte- Isabelle se quedo mirando a Magnus por un momento y luego miro a su hermano en busca de aprobación
-vale-dijo Alec, entonces Magnus sonrio y lo guio a una de las mesas, mientras le indicaba a isabelle que por favor tirara esa arma y limpiara un poco de sangre, saco el botiquín de la cafetería y rasgo la camisa de alec, que por cierto le dio vista de sus grandes y trabajados brazos, pero magnus se concentro en la herida.(…)
Ya habían pasado dos días después de eso, magnus se encontraba en su edificio, hasta que tocaron la puerta, el se extraño un poco y fue a abrir, sorprendiéndose enormemente al ver al oji azul al otro lado, le invito a pasar y a sentarse sin quitarle la mirada, traía una esqueleta, asi que pudo notar el vendaje que tenia en el brazo derecho
-lamento llegar de sorpresa-dijo este con la mirada gacha-pero no te agradeci el otro dia-levanto la mirada a el y sonrio ligeramente junto con un sonrojo-gracias por haberme curado ese dia –magnus lo miraba expectante, pero en silencio, una vez el acabo de hablar magnus sonrio
-no te preocupes, no fue nada, por suerte no fue tan grave –en ese momento Alec suspiro, como si estuviera sacando fuerzas para decir algo mas
-tambien lamento no haberte llamado- eso si sorprendio un poco a Magnus, ya que no se esperaba ese comentario de parte del ojiazul
-no te preocupes por eso, lo entiendo- Magnus pensaba que Alec quizás ni siquiera era Gay, el hecho que estuviera aquí no decía nada, solo vino a agradecerme, cosa que haría cualquiera.
-tambien estoy libre el viernes- dijo de golpe, Magnus lo volteo a ver como si este lo hubiera dicho en otro idioma, lo que a Alec le incomodo un poco- quizás debería irme –dijo finalmente, se levanto y Magnus se quedo mirándole, ambos se acercaron a la puerta pero Magnus evito que la abriera, se quedo mirando a Alec el cual le sostuvo la mirada por un momento, repasaba todo su rostro, sus hermosos ojos azules, sus facciones, finalmente sus labios, a riesgo de quedar como un atrevido magnus jalo a Alec hacia el y unio sus labios, aunque el peli negro se sorprendio no tardo en corresponder el beso, aquel beso que ambos estaban esperando ansiosamente, pero que ninguno de los dos admitiría, mientras su cuerpo se relajaba un poco y acercaba un poco mas al contrario, no sabia cuanto había durado el beso y la verdad, no le importaba, una vez se separaron ambos regularon su respiración y Magnus sonrio
-paso por ti a la cafetería- dicho esto la puerta se abrió.Buenoooo espero que les guste, a mi no me gusto mucho pero pos yolo, los quiero. :3
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pequeñas historias malec
Romancecomo dice el titulo seran pequeñas historias malec, espero les gusten...