— Baja la puerta del garaje, ____
sabes positivamente que así no es…
Dios mío hija eres imposible—
Marie, que llevaba dos bolsas asidas de sus manos, bufó y caminó hacia su hija que se peleaba con el dintel de la puerta. Estaba atascado y
había que hacer un ligero gesto con
la muñeca para que la puerta cerrara
correctamente.
Miró a su madre como lo había
hecho unas cientos de veces y a
continuación se explayó en mirar las
nubes de aquel pueblo recóndito.
Hoy era un flamante día soleado,
raro, muy raro. Pero ella se sentía
dichosa.
Los días soleados en Mullingar no se prodigaban demasiado y estar en
aquellas circunstancias, en aquel día, era todo un festín para ella.
Era sábado y habían ido a comprar alsupermercado del pueblo. Allí se
habían encontrado con James y Luke, quien amablemente las había
ayudado a meter las bolsas en el
maletero del utilitario de Marie.
Luke estaba loco por ____ y ella
lo sabía. Habían ido a cenar un par
de veces a Dublin y también
habían paseado por el bosque
alguna que otra vez.
Pero para ____, Luke era un buen
amigo que no quería perder. Cuando
comenzaba a plantear una posible
intimidad con ella, ____ se tensaba
y él lo notaba y se retractaba.
Era el amigo más leal que había
tenido desde que se mudó a Mullingar. Y allí había estado hasta ahora. No la había abandonado en ningún momento. Nunca. Ni después de aquello…. Aquello…
Después de la sesión espiritista nada fue igual. Cuando despertó se
hallaba en la cama del hospital del
pueblo. Le había dado una gran
crisis asmática y un poco más y no
vive para contarlo. Le daban
escalofríos cada vez que lo
recordaba… todo.
Cuando volvió a las clases todo
parecía normal, pero los pupitres de
Kate y Erika permanecieron vacios
durante varios días. La clase estaba
más calmada que de costumbre y
nadie le preguntó cómo había estado en el hospital cuando estuvo
convaleciente.
Y un día se enteró… se enteró que
Erika y Kate murieron al ser
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Demon Prince
Paranormal______ descubre que la sesión espiritista hecha en su adolescencia le marca la vida hasta lo altamente improbable, la aparición del príncipe de los demonios: Zayn I.