O Avatar: The Last Airbender, es una serie de los 2000 (como por el 2005, si mal no recuerdo) que pasaban por Nickelodeon. Para algunos significó parte importante de la infancia y a otros simplemente no les importaba.
En mi caso personal, lo veía casualmente porque nunca llegaba a ver los capítulos nuevos y perdí el interés.
Pero Avatar es, y probablemente sea, uno de los mejores cartoons/series animadas de esta época. Su historia, personajes, creatividad y balance con factores de la vida real son cosas que me encantaron. Porque sí, Proxi se vio Avatar hace poco gracias al bendito Netflix.
Entonces, ¿por qué deberías verte (o saber de la joya que significa) Avatar?
Primero vayamos con los personajes para que entiendas la historia (?).
Tenemos al héroe, al elegido, al Avatar.
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Este niño.
Este niño de 112 años, pero quedó atrapado en un iceberg y quedó paralizado biológicamente y por eso tiene su apariencia de 12.
Este niño es Aang, un maestro aire, criado por monjes del Templo Aire del Sur. Su nombre «Aang» significa «vuelo gentil» y no podría quedarle más. Antes de que apareciera Zuko yo tenía a Aang como personaje favorito; es muy amable y compasivo, no es capaz de matar a ningún ser vivo debido a que desde pequeño, le enseñaron que todas las vidas son sagradas y deben ser respetadas por igual (por eso mismo es que Aang no come carne). En ciertos momentos esta compasividad me enojaba, pero a la final no podía más que darle la razón, Aang es demasiado gentil.
Y aunque eso pueda parecerte cliché, pues no.
Es el elegido, sí, es muy buena gente, sí, pero su desarrollo en la historia y situación lo diferencian, o por lo menos lo hacen reconocible entre muchos otros protagonistas de cualquier otra historia.
Efectivamente, la situación de Avatar no la eliges, sino que ella te elige a ti. Y Aang, por eso mismo, es el elegido, mas no le gusta serlo. Tiene la presión de tener que salvar al mundo de un megalómano maestro fuego que aumentan diez veces más su poder cuando cada cuanto tiempo aparece un cometa en el cielo, la presión de no tener que decepcionar a todos de nuevo y dejarlos morir como su culpa más grande, el genocidio de todos los maestros aire existentes, por lo que Aang se siente solo en el mundo con respecto a su situación.
Es solo un niño.
Y lo mejor de Aang es que es como el viento, sabe dejarse llevar y no se aferra mucho a las penas como para entrar en algún tipo de depresión o ansiedad (aunque sí hayan veces en las que se irrite). Y entonces gracias al épico opening descubrimos que el Avatar no está solo, sino que tiene dos compañeros principales.
A Katara,
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