-y recuerdas algo de lo que pasó?- preguntó Sierra para darle un sorbo a su malteada
- lastimosamente no- dije con cara como de decepción- pero tengo sus redes sociales- Sierra me miró, yo la miré y le sonreí- son calientes como el carajo- dijo Sierra, tomando de manera brusca mí teléfono y admirando la imagen de los tres chicos en la playa
-no tengo ni idea de como me terminé acostando con ellos- dije mirándola a la cara
-Puta suerte!-dijo ella, mirándome entre impresionada y divertida- pero recuerda que tu tampoco eres fea
-oh, por favor- dije sin tomar el cumplido- son putos famosos!!
-Y eso que? Recuerdas que trabajaste de modelo? No mientas, eres bonita
-Si yo soy bonita que queda para ti?- dije mirándola, graciosa, empezamos a reír juntas. Éste domingo estaba empezando
Los domingos siempre solemos hacer niñerías, como por ejemplo correr por toda la casa, jugar videojuegos, poner música a tal volumen que molesta a los vecinos y hacer caras estúpidas para sacarnos fotos y subirlas a redes sociales.
Ya era de noche, mañana era lunes y tenía que ir a trabajar como traductora en una editorial de un amigo de mis padres. No me quejaba, podía darme muchos gustos y pagar todo lo necesario para el departamento.
Mi rutina fue igual toda la semana y no me había dado cuenta que rápido que había llegado de nuevo el fin de semana. Obviamente íbamos a salir a un club con algunas amigas.Maldito y delicioso alcohol, me hacía emborrachar hasta el olvido