He llegado a bailar sin mover los pies con cada una de tus sonrisas. Me he dado cuenta que tus labios, por finos que parezcan, me hacen sentir perdida y con ganas de conocer cada rincón que ocultan. No he podido evitar esbozar una sonrisa cada vez que juntabas tu frente con mi frente y mi nariz con tu nariz y buscabas mi mirada. Mis mofletes, como tú los solías llamar, aún recuerdan tus manos acariciándolos mientras me besabas. Mi mirada evitando la tuya cada vez que la buscabas para decirla te quiero.
Hoy, yo no bailo por tus sonrisas, otras conocen tus labios y sonríen al tenerte cerca.
Hoy, acaricias otros mofletes , besas otros labios y ya no me buscas con la mirada.
Hoy, es mi mirada la que busca la tuya para decirla te quiero.~Yoana Obregón