Ojalá siempre, pueda verte sonreír y ver cómo bailas frente al espejo nuevos pasos de baile improvisados al compás de la música.
Ojalá siempre, seas tan risueña e infantil como para no tomarte la vida tan enserio y salir a la calle como si solo fuera tuya.
Ojalá siempre, seas capaz de reírte de ti misma y de aprender a cada corto paso que des.
Ojalá siempre, seas capaz de mirarte, reconfortarte y simplemente tirar.
Ojalá siempre, te veas guapa y no permitas que nada ni absolutamente nadie baje ni un gramo de tu autoestima.
Ojalá siempre, simplemente, seas tú.
~Yoana Obregón