BELIEVE/j.b-

~45: What's happening to me?~

Narra ____

Sonreí, cualquier persona desearía despertar de este modo. Tecleé rápidamente un mensaje de respuesta.

"Estudié demasiado como para que me vaya bien, gracias. También te amo, suerte con el show de esta noche. Besooos. Lol".

Dejé otra vez el teléfono en la mesita de noche y ahora sí que me levanté. Busqué toallas en mi armario y entré al baño. La ducha no duró más de quince minutos, ya que me había bañado la noche anterior antes de dormir. Busqué qué ponerme y opté por una blusa color rojo, una falda entubada que me llegaba un poco más arriba de la rodilla, unas simples vans del mismo color que mi blusa en mis pies y unos cuantos accesorios. Una vez lista, bajé a tomar desayuno junto a mi familia. Papá estaba leyendo el periódico, creo que hoy tenía libre porque no estaba vestido con su típico traje costoso, al contrario, aún estaba en pijama; mamá preparaba el desayuno para todos, mientras que Martín estaba absorto en su celular, desconectado del mundo.

-Buenos días, Familia- Dicho esto, besé la mejilla de cada uno de ellos. 

-Buenos días, ___ - Me respondieron todos a coro, yo solté una carcajada. Todos los días era lo mismo, yo decía "buenos días" y ellos me respondían como de costumbre. 

-¿Preparada para tu primer exámen de Álgebra avanzada? - Preguntó mi madre algo... entusiasmada. 

-Claro que sí- Contesté con una sonrisa en mi rostro, yo amo Álgebra. 

-¡Estupendo!- Exclamó eufórica. - Te preparé unos bocados y milshake de frutilla, tu favorito- Señaló una pequeña bolsa café, de esas típicas americanas, donde se suponía estaba mi merienda. 

-Gracias- Contesté contenta por su preocupación. 

-De nada. Dicen por ahí que con el estómago lleno se piensa mejor. - Papá soltó una carcajada y miró divertido a mi mamá. 

-¿Hablas en serio, Sandra? 

-Pues claro que sí.- Dijo ella seriamente.- ¿tienes algo contra eso? 

-¡Claro que no, linda! Solo... me causó gracia, no tienes que inventar excusas para preocuparte de ___, ella sigue siendo nuestra pequeña bebita. 

-¿Oh, en serio, papá? - Pregunté imitando lo que dijo hace unos segundos, mientras rodaba los ojos- ¡No soy un bebé!. 

-Claro que lo eres, eres nuestra pequeña niña. - Me respondió sonriendo ampliamente. 

-Y nunca dejarás de serlo, que te quede claro- aclaró mamá, apuntándome con un dedo. Yo solo reí.

-Está bien, como ustedes quieran...

Hace una semana y tres días que comenzó Believe Tour, así que llevamos casi dos semanas separados con Justin. Lo extraño demasiado; extraño sus caricias, sus besos, sus abrazos, su risa, sus bromas extremadamente aburridas, cómo me mira, todo... absolutamente todo de él. Y en el fondo sé que no puedo hacer absolutamente nada para "no extrañarlo", porque él estará de gira por mucho tiempo y viajará por muchos países y no hay modo de que yo pueda viajar a verlo a algún destino... mi padre jamás me dejaría ir.

(...)

Al terminar de desayunar, subí a mi habitación para poder lavar mis dientes y tomar mi bolso, luego salí rápidamente de la casa. Madisson estaba esperándome fuera de su puerta, con una sonrisa de oreja a oreja en su rostro, gesto que me extrañó, ya que últimamente no se había sentido nada de bien "emocionalmente" y casi todos los días mientras conversábamos, ella lloraba.

-¿Ocurrió algo de lo que yo no me he enterado? - Pregunté extraña. 

-Uhm... puede que sí- Respondió ella restándole importancia. Besé su mejilla y comenzamos a caminar a pasos apresurados hasta la escuela. Yo enarqué una ceja y la miré.