Pesadilla

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Lunes 18 de Mayo del 2013

La repentina desaparición del joven actor Conor O'Malley ha conmocionado a la población inglesa, sumándose a una más de las desapariciones de jóvenes adolescentes, que se han estado suscitando en los últimos meses.

El detective Yahiko, los habia mandado a llamar por número de lista, hacia un salón vacío.

Cuando su turno de ser interrogado llego, le dijo todo lo que sabía de la chica y su relación con esta, lo cual no era mucho, solo que esta lo invitaba muy seguido a parques, aunque no se podría decir que fueran amigos.

También le conto que en la última charla que tuvo con ella, discutieron un poco por lo mismo.

Perdido en sus propios pensamientos, no fue consiente de cuando Naruto llego a él, hasta que lo tuvo a su lado.

—Ya termino el interrogatorio, nos podemos ir— le dijo Naruto a la par que entraba en el auto.

Imito a su hermanastro y se dispuso a conducir hacia su casa, sin embargo en el camino a esta, Naruto habia visto algo que habia llamado su atención a tal punto que le pido que detuviera el auto.

—Regreso en un momento— le dijo bajándose para dirigirse a una biblioteca. En la que no tardo mucho, ya que en menos de 5 minutos estaba de vuelta.

—Encontraste algo interesante— dijo antes de arrancar, dándole un último vistazo a la biblioteca.

—Algo así, mañana podemos hacer una parada rápida—

—Sí, pero se rápido—

Inmediatamente que llegaron a su casa, Sasuke se encamino a su habitación y Naruto a la suya en donde permanecieron hasta que bajaron a cenar encontrándose con sus padres e Itachi.

A la mañana siguiente, mientras comía con sus amigos se sorprendió un poco al ver a Naruto comer con compañeras de su salón, ya que nunca habia visto a su hermanastro conviviendo con varias personas. Todas las veces que habia ido a Rumania nunca habia visto al rubio con ningún amigo, solo lo habia visto con Minato o sus abuelos.

Al finalizar las clases, se despidió rápidamente de Ino y Gaara, para que su hermanastro lo llevara a la biblioteca que habia descubierto en el camino, los libros en particular los históricos siempre habían sido de su agrado, un rasgo que innegablemente habia heredado de sus padres.

Encontró a Sasuke esperándolo al lado del auto, listo para llevarlo a la biblioteca, así que sin intercambiar nada más que una mirada con su hermanastro se subió al auto.

Durante el camino, ninguno dijo nada, Sasuke se limitó a manejar y él a ver el paisaje por la ventana. Hasta que Sasuke detuvo el auto debido a un choque automovilístico.

Un auto se habia pasado la señal de tránsito impactando contra otro, justo en la parte del copiloto.

Ver a aquello inevitablemente le habia provocado una punzada en su pecho al recordar la propia muerte de su madre quien habia perdido la vida en un accidente automovilístico.

Y mientras miraba con dolor la escena del accidente, no pudo evitar notar como un pequeño niño lloraba sin cesar mientras sus padres eran subidos a la ambulancia.

Así que sin decirle nada a Sasuke se bajó del auto y camino hacia aquel niño consolándolo, al mismo tiempo en que le decía al oído, las palabras que eran susurradas a su oído por una imagen blanquecina de una joven mujer.

Sasuke solo pudo ver sorprendido, como Naruto quien para él era alguien frio, intentaba consolar al pequeño niño que muy seguramente acababa de quedar huérfano

Cuando Naruto regreso al auto, después de que las ambulancias se fueran y la policía se llevara al niño. Naruto le dijo con un semblante claramente triste— Puedes llevarme mejor mañana a la biblioteca— y el solo pudo asentir al mismo tiempo en que encendía el auto.

Una vez que llego a su casa, se fue directo a su habitación y se acostó en su cama mirando en dirección a su bufetero en donde reposaba una foto de su mamá, la tomo y se quedó dormido mientras recordaba la calidez que sentía cada vez que esta lo abrazaba y le susurraba al ido que todo estaba bien.

Perdido en su placido sueño, donde una acogedora calidez lo cubría de la nada esta empezó a cambiar por una negra niebla. Un frio glaciar se apodero de su sistema mientras sentía la sensación de tener fuertemente sus muñecas atadas, al mismo tiempo que sentía pequeños cortes abrirse en su espalda.

Despertó abruptamente con el cuerpo bañado en sudor, y lo primero que hiso fue ver sus muñecas, las cuales estaban intactas, pero él podia sentir muy claramente un fuerte dolor provenir de estas y de su espalda.


La habitación del suicidioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora