Estamos en esa etapa de la vida en la que empezamos a conocernos a nosotros mismo y desarrollar nuestra personalidad, a conocer realmente quien es nuestro amigo, cambiar físicamente, pasar por comportamientos raros debido a nuestras hormonas, y empezar a experimentar cosas como el amor. Estamos floreciendo cómo las rosas. Pero florecer es difícil, podemos crecer torcidos, o no crecer jamás.
Les seré sincera, a veces tengo miedo de lo que pueda pasar, pues solía ser una niña que jugaba con muñecas, que vivía absorta al mundo y sus peligros, y era tan plana como una tabla; simplemente, de un día para otro, las muñecas pasaron a segundo plano sin yo darme cuenta, y fueron reemplazadas por una computadora y un teléfono, empecé a tener verdadera conciencia de las cosas del mundo, y donde todo era plano aparecieron curvas. Simplemente crecí, como todos, y el tiempo no preguntó si estaba lista para ello.
"Crece pequeña flor, sin apuros, sin ataduras, sin tristezas, mantén la cordura, ¡vive!, ama, conviértete en una gran flor; sé que tienes miedo de crecer, pero está bien, sabrás que hacer"
Ustedes sabrán que hacer....
A.

ESTÁS LEYENDO
A de anonimato
PuisiEstá no es una historia como las demás, es algo más privado. No lo llamaría diario, ni blog, sino cartas de esas experiencias vividas en carne propia que, posiblemente, tú en algún momento también las vivido. Así que te invito a leer A de anonimato...