Una Vez

Capitulo 4

Toque la puerta tres veces y me abrió Abie le iba a pedir disculpas por no poder haberla acompañado a clase en la mañana pero cuando me vio me abrazo y me pregunto cómo estaba yo quede impactado porque no pensé que ella fuera a hacer eso la abrace de vuelta

-yo estoy bien –dije sonriendo- perdón por no poderte acompañar hoy en la mañana a la escuela es que no me sentía bien
-No te preocupes por eso –dijo un poco preocupada- lo que importa es que ya estas mejor
-Si es creo –dije
-Sí, bueno pasa tenemos mucho que hacer –dijo sonriendo
-¿Ya pensaste lo de salir mañana o el domingo? –pregunte curioso
-Sí, el domingo a las 7pm, es que Thomas me invito también a salir mañana
-Está bien no te preocupes el domingo no hay problema –dije aparentando estas tranquilo, pero en realidad quería matar a Thomas, es que aún no entendía ¿Por qué a ella? ¿Lo hacían solo para lastimarla? Sea lo que sea yo no dejaría que Thomas o Benjamín la lastimaran.

-Bien y que preparamos primero –pregunto Abie
-El café no estaría mal –dije sonriéndole
-Está bien –dijo y empezó a sacar unas cosas de la despensa
-te parece bien si ¿preparamos un Capuchino?
-Nunca lo he probado así que, preparemos un Capuchino

Empezamos a prepararlo junto no nos llevó mucho tiempo, ella me decía que hacer y yo lo hacía, después de unos 10 minutos terminamos pero no lo podíamos tomar hasta terminar la pizza, después de que limpiamos todo lo que habíamos sacado para preparar el café, Abie me dijo que su madre había comprado unos ingredientes para la preparación de la pizza y pues genial sacamos la harina de unas bolsas, el queso, salsas y demás, hicimos la masa de la pizza y cuando llego la hora de abrir la harina no me pude resistir a arrojarle a Abie, mientras pensaba eso sonreí involuntariamente y creo que ella se había dado cuenta de lo que yo quería hacer, así que tomo en sus manos una gran cantidad de harina y me la lanzo en la cara, menos mal no tenía la boca abierta pero me entro un poco en la nariz y me dieron ganas de estornudar pero con la risa que me dio se volvió un poco difícil estornudar, tome también un poco de harina en mis manos y se lo lance también ella por mala suerte si tenía la boca abierta porque se estaba burlando de mí, yo moría de estornudos y ella de tos, mientras yo me quitaba la haría de la cara y el cabello, mire que el suelo estaba completamente blanco a nuestro alrededor, cuando levante la mirada vi que Abie estaba por tomar más harina pero le quite la bolsa pero no fui muy veloz y termine lleno de harina por segunda vez, lo bueno es que había cerrado bien la boca y los ojos, Abie se empezó a reír de nuevo y yo la seguí con la risa, me sacudí de nuevo y seguimos con la preparación, cuando ya estaba lista la lleve hasta un horno que tenían, la pusimos y esperamos unos 10 minutos, mientras la pizza estaba en el horno nosotros fuimos a limpiar el desastre de la cocina, cuando estuvo lista ella probo la pizza y yo el Capuchino la verdad esta delicioso.

-Tienes talento para preparar el Capuchino –dije dejando el vaso sobre la mesa
-Y tú tienes talento para la pizza niño –respondió aun comiendo la pizza

Me dirigí a la cocina para llevar mi rebana de pizza y el otro vaso de Capuchino que era para Abie, me senté se lo deje sobre la mesa y me empecé a comer la pizza, no es por ser modesto pero enserio si me había quedado bien la pizza, soy un buen cocinero lo sé, me quede un rato más después de que termine la pizza y le empecé a preguntar sobre su familia, se mudaron aquí porque le ofrecían mejor trabajo a su madre que trabaja en un banco y su padre es arquitecto, tenía un perro pero se quedó en Londres con su abuela materna ella tenía buena relación con toda su familia y son muy unidos. Cuando mire la hora eran las 11:02pm así que le dije que me iba que ella debía dormir.

Me acompaño hasta la puerta

-Estuvo muy divertido hoy –dijo ella
-Lose, pero aún me debes, harina en la cara –dije riendo
-No te lo dejare tan fácil –dijo sonriendo
-Ya lo veremos –respondí guillando el ojo
-Bueno hablamos mañana por la ventana –rio un poco suave- y recupérate –dijo en todo de mama preocupada
-Como digas mama, Adiós –dije girándome
-Adiós