Ghost Hunter (JAEYONG)

IV

Traté con todas mis fuerzas safarme de su agarre pero este tipo si que era fuerte.

- Imbécil, quédate quieto que no puedo hacerlo bien.

Luego de unos minutos, terminó el forcejeo y se apartó de la cama, me había amarrado las manos. Bueno...falsa alarma.

- ¿Acaso creíste que iba a hacerte algo raro? ¿Tocarte?- dijo acercándose lentamente a mi hasta que nuestros rostros quedaron a 5 centímetros de chocarse.

- Para nada- dije seriamente y aparté el rostro.

- Bueno, te contaré mi plan. Digamos que son alrededor de 4 hombres, escapé de ellos pero ahora deben estar buscándome por todos los rincones. Encontré esta mansión abandonada y pensé que era el escondite perfecto, hasta que te encontré a ti. Pienso que deberíamos quedarnos hasta el amanecer, no van a buscarme para siempre. ¿Qué piensas?

- Yo aquí no tengo opinión, debo hacer todo lo que dices- rodé los ojos.

-Exacto, estas entendiendo- dijo Jaehyun con una bella sonrisa.

- Bueno, ahora...

Escuchamos un golpe, seguramente provenía del jardín o de la entrada.

Mierda

-Debemos escondernos, pero no tengo idea donde, comienza a buscar también.

Jaehyun se veía completamente desesperado, se ve que si lo atrapan no salía de esta y yo desafortunadamente estaba a su lado, también me matarían a mí. Al caminar por toda la habitación, mis dedos recorren las paredes y siento algo extraño en la esquina de la misma. Hay una abertura, la empujo hacia fuera y me encuentro con un tipo de armario o closet escondido. Demasiado raro pero podría servir. Jaehyun me miró y rápidamente nos escabullimos dentro.

Mala idea

Cuando mencioné que era pequeño, era literalmente pequeño. Cabían dos personas pero estábamos apretados y no pude evitar quedar pegado a su pecho. Jaehyun me envolvió en un tipo de abrazo para que yo pudiera tener más espacio. Esto era malditamente incómodo. Teníamos aire ya que habían unos huecos que daban hacia el exterior.

- Si querías estar así, deberías haberlo dicho hace rato.

-Cállate, no digas ni una palabra- comencé a sentir como mi cara se volvía caliente de la vergüenza.

Sus brazos eran fuertes, aunque sostenía mi cuerpo como si fuese la cosa más delicada del mundo. Se sentía agradable.

- No querrás escuchar las ideas sucias que se me ocurren estando así, solamente nosotros dos, en la oscuridad y apretados. Un encuentro casual y llenos de adrenalina ¿Qué crees?- dijo con una voz jodidamente sexy, espera, ¿Qué mierda estoy pensando?...

Su cuerpo se iba apretando más a mí, me estaba mareando.

-Vamos, se que te quedaste embobado cuando me viste, puedo analizar fácilmente a las personas y pude notar como me comías con la mirada. ¿No te parezco atractivo?- dijo susurrando en mi oído y noté como sus manos fueron bajando hasta mi trasero y dándole un buen apretón.

- Aaah espe-ra Jaehyun.... - ya me había jodido por completo.

Sus labios se fueron acercando a los míos y caí, no pude resistirme. Sus labios eran tan suaves y encajaban perfectamente con los míos, como si fueran piezas de un rompecabezas. El beso se fue intensificando y metió lentamente su lengua dentro de mi cavidad bucal.

- Vamos abre más la boca, bebé.

Nunca me imagine que luego de venir a grabar un video de mierda sobre fantasmas terminaría besándome apasionadamente con un chico atractivo y dentro de un closet secreto. Tratando de escapar de gente peligrosa que me matarían también a mi por metido.

Jaehyun ladeo mi cabeza y comenzó a besar y morder mi cuello, una y otra vez. Dejándome marcas por todos lados. Podía sentir como nuestras erecciones iban creciendo a medida que nuestros cuerpos ya no daban más. Por ultimo, soltó la soga que estaba en mis manos.

- Jaehyun ¿Qué haces?- solté un gemido cuando me dio la vuelta y se apretó contra mi, podía sentir que tan duro estaba ya que se restregaba fuertemente contra mi trasero. Esa fricción me estaba haciendo perder todos mis sentidos.

-Por favor, haz algo con esto que tengo aquí- le dije gimiendo y rogándole, tomé su mano y la dirigí hacia el cierre del pantalón.

-Por favor- volví a repetirle en un gemido suplicante.

- Lo que me pidas- su voz resonó en mi oído.

Lo ayudé a quitarme los pantalones hasta que cayeron hasta mis pies y con solo una mano bajo mi boxer dejando mi pene expuesto y completamente erecto. Quería morirme de la vergüenza pero necesitaba urgentemente que me toque.

Masajeaba con lentitud la punta, sabiendo que era una de las partes más sensibles. Me muerdo los labios y trato de callar mis gritos. Me chupaba y me mordía el cuello de nuevo, yo movía mis caderas al ritmo de su mano, bajaba y subía mientras iba aumentando la velocidad. Mis rodillas ya no aguantaban hasta que di mi último grito y las grandes manos de Jaehyun quedaron empapadas.

Me di la vuelta y lo besé de nuevo, pero sentí que él todavía estaba duro.

- No es justo que yo acabe y tu sigas así ¿Me dejas ayudarte?- dije con una pequeña risita y bajé hasta la altura del cierre. Él no dijo ni una palabra.

Bajé desesperadamente sus pantalones y el boxer al mismo tiempo. Podía sentir como me clavaba la mirada, le daría el mejor sexo oral de su vida. Proseguí a darle pequeños besos en la punta, para tratar de probarlo y ver si resistía. Fruncía el seño y se tocaba la frente, muy bien. Luego cuando menos se lo esperaba, lo metí todo en mi boca y lo chupé lento pero seguro. Con mi mano apretaba y luego succionaba sus bolas. Mierda, sus gemidos me pondrían duro de nuevo.

Tomé su pene de nuevo y lo introduje en mi boca con rápidos movimientos, entraba y salía con desesperación. Hasta que siento que su pelvis se tensa y llega el momento, Jaehyun trata de apartarme pero yo no se lo permití, lo quería dentro. Y si, lo tragué todo.

- Eso fue una locura- dijo descansando sobre mi hombro.

Me limpie la frente que estaba empapada de sudor, eso fue intenso. Acomodé mi ropa y cabello.

- ¿Ahora que haremos? ¿Podremos salir de aquí? Estuvimos un buen rato aquí dentro, ya no se escucha nada.

Yo salí primero y el iba detrás de mi.

- Traje mi auto, podemos escapar con él.

- Fase 2, irnos a la mierda- dijo Jaehyun con una graciosa y tonta expresión en el rostro.