Hace un instante.

Cosas tan bonitas.

-Annie: ¡Poncho!.-Grito la rubia-. Te estoy llamando hace horas.

-Poncho: Ay ya, mi amoooor, no exageres.-Abrazando-. Tranquila.

-Annie: ¿Y Dann?.

-Poncho: Con Mía, jugando. No quiso venir.

-Annie: Alfonso Herrera, como te gana  un niño de 4 años.

-Poncho: Es que Mía lo estaba entreteniendo y estaban jugando.

-Annie: .-Poncho le besa el cuello-. Mmm. ¿Que insinua mi esposo travieso?.

-Poncho: Nada, Nada. Sólo beso a mi amada esposa. ¿Sabes una cosa?, me encanta tu olor.

-Annie: Jaja, eres un travieso Alfonso Herrera. Pero ya, trae a los niños.

-Poncho: Es temprano aún.

-Annie: No espera, hablando enserio, ¿Que hora es?.

-Poncho: Como las 20:30pm.

-Annie: Pero Poncho.-Entra al baño-.

-Poncho: ¿Que, que pasó ahora?.

-Annie: Mis pastillas, últimamente me las e tomado muy desordenadas y nada que ver.

-Poncho: Pues tu sabes más que bien, que te pedí hace muchísimo tiempo que las dejaras de tomar. Recuerda que cuesta para que tu sistema se regularise es bastante tiempo y yo quiero otro bebé.

-Annie: O sea, claro como yo lo llevo nueve meses dentro, y sufro con las contracciones... pues es fácil. Y que puedo decir Alfonso Herrera. Para mi segundo embarazo yo me cuidaba.

-Poncho: Entonces, no hay necesidad de que lo sigas haciendo.-Basandole el cuello-. ¿O acaso tú no quieres tener otro bebé conmigo?.

-Annie:.-Abrazandolo-. Claro que si mi amor.-Alfonso la lanza a la cama-. Jaja si quiero tener otro bebé.

-Poncho: Entonces, ¿Podríamos comenzar a prepararlo?.

-Annie: .-Quitándole la camiseta-. Si, me parece una buena idea.-Besandolo-.

-Mía: ¡Mami!.-Tocando la puerta-. Ya terminamos de jugar con Dann.

-Poncho: .-Poniéndose la camiseta-. Hoy me toca a mi con Mía.

-Annie: Jaja, queda pendiente.

Con nosotros siempre era lo mismo, vivíamos con las manos en el cuerpo del otro, y aprovechamos cada ocasión para estar más juntos que nunca, las duchas, mañanas cocinando, siempre buscábamos todas las maneras para vivir nuestro amor sin descuidar a nuestros pequeños tesoros. Nos turnabamos para hacerles compañía antes de dormir y ellos también eran felices con eso, al principio Mía creía que dejaría de ser especial, pero Alfonso se encargó de hacerla sentir bien y jamás desplazarla.

Después de unos meses me Di cuenta que mi hija era una hermana mayor increíble, es protectora, amable y por sobre todo su mayor ejemplo, es una niña espectacular la cual ama enseñarle cosas buenas y nuevas a su hermano pequeño.

Dann es una cosa maravillosa, un pequeño de mami muy consentido, que al igual que su padre ama el fútbol (Poncho tiene que ver). Para su corta edad es alguien muy audaz e inteligente.

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-Poncho: Entonces, ¿Si te gustó el cuento?.

-Mía: Si papi, siempre me gustan tus cuentos.-Acomodandose-. Buenas noches.

-Poncho:¿Sabes cuánto te amo, verdad?.

-Mía: Mmm, ¿Muchísimo?.

-Poncho: Así es, muchísimo.- Besando su frente-. Buenas noches mi vida.

-Mía: Adiós Papi.

Dos hijos y una esposa maravillosa, Anahí y yo con el pasar de los años nos conocíamos de una forma increíble, como toda pareja normal teníamos uno que otro rose, e ahí donde es bueno conocer a tu pareja, los dos siempre evitamos hacernos cosas que sabemos nos pueden herir de verdad, mi trabajo a veces me hacía estar casi todo el día fuera, pero llegar en la noche y darme cuenta lo más afortunado que soy, me llena el corazón de una forma única, algo único, inigualable.

Últimos capítulos! 😢😢😢😢