Capitulo 6

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Jueves 24 de Septiembre

Desperté junto a un gran flash de luz.
Des en mi cama no se había sobresaltado a pesar de que yo si lo hiciera, comenzaba a acostumbrarse... Me senté al costado de mi cama y llevé mis manos a mi rostro mientras la respiración y el corazón confirmaban a la locura de mi sueño. Encendí el velador y no quise mirar el horario del reloj, pero siendo inevitable alejar mi vista, 4:40 am marcaba digitalmente. <Un minuto más tarde>, pensé nuevamente. Me sentí aliviada de observar a mí alrededor y notar que todo continuaba en el mismo lugar y de la misma forma, los sueños me habían vuelto paranoica... aunque debía reconocer que era la primera vez que deseaba retornar a aquella narcosis de ensueño, nunca había tenido una tan vívida. Y sabía que solo tendría una por noche, así que no me esforcé siquiera en intentar continuar la conversación con aquella señora, al menos no en ese momento.

Nota 1

El tiempo... ¿Qué es el tiempo?

Recuerdo esa pregunta desde el día en que Dunne tuvo la oportunidad de cuestionarla frente a aquel auditorio, en aquella sala de universidad, a donde su voz se hacía eco tanto en el espacio como en mis pensamientos

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Recuerdo esa pregunta desde el día en que Dunne tuvo la oportunidad de cuestionarla frente a aquel auditorio, en aquella sala de universidad, a donde su voz se hacía eco tanto en el espacio como en mis pensamientos. Había asistido a aquella "catarsis científica", como yo le había llamado, gracias a Josh y su insistencia en que debía acompañarlo.

El tiempo es una manera circunstancial, extremista y constante de medir instantes, y es aquel al que le atribuimos el poder del olvido, o el de destrucción o construcción de algo, es "la expresión del movimiento que existe en el Universo" según la física, o "la duración de las cosas que se encuentran sujetas al cambio"; pero sobre todo, el tiempo para mí, era nuestro más fiel organizador del día al que, por ende, sometíamos a distintas transformaciones según la manera en que fuésemos a observarlo. Resulta que nuestra realidad, conforme lo que yo creía, era capaz de movilizar al tiempo "a nuestro piacere", y es que nuestros pensamientos frente a un momento de placer o disgusto, harían acelerar o enlentecer al paso de los segundos sin que realmente aquello estuviese sucediendo. El tiempo se encuentra rodeándonos en todo lo que existe tal como los números, y tanto en la física como en la psicología, se encontraban explicaciones acerca de la "detención" del tiempo que somos capaces de percibir en determinadas situaciones, por ejemplo con la típica frase: "Siento que el tiempo se detiene al estar con él/ella"...

Las emociones y los agujeros negros tenían más en común de lo que hubiera imaginado; cuando estamos con esa persona a la que amamos, dejamos de percibir al tiempo debido a que nuestro inconsciente no puede hacerlo, y frente a tal ocasión es cuando por el nos encontramos dominados; y en el centro de gravedad de una galaxia, en su agujero negro, el tiempo casi dejaría de sucederse por la cantidad de atracción que nos estaría arrastrando a su centro. Pensaba... Si nuestros ojos representasen a las galaxias, el tiempo realmente se enlentecería al encontrarnos con nuestro "centro gravitacional", es decir con esa persona... y mi explicación entendería a las parejas de ancianos capaces de haber vivido tanto tiempo juntos, ya que estando uno con el otro, todo su tiempo se habría extendido.

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⏰ Última actualización: Apr 18, 2017 ⏰

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