Iniciase la luz en mis ojos:
Hielo roto era mi entorno
y nieve sucia cubría mi sombra,
mas sombras eran
y ausencia poseían sobre primavera que nacía.
Tosca, bruta, gran farola apagada
sobre tierna, pulcra,
pequeña carretera no pura
donde virginidad a la vista no esta.
Muerta, perdida, mi alma;
¡Entre espíritus besándote estas!
Siendo tu y sabiendo el yo,
heridos los ojos, los parpados rotos.
Soledad no tengo, amo, busco,
que de primavera disfrazada no esta
y en invierno mis deseos están.
Luz hastiada, cansada de buscar esta
y por tanto, sin embargo;
acábese la luz en mis parpados ya.