No podía dormir, tenía sueño, pero no podía dejar de pensar en todo lo que había pasado. Giró su cabeza mirando al pequeño pelinegro, con el que compartía cama, dormir plácidamente con un brazo rodeando su barriga, la cual aún no había crecido, como si quisiera proteger a su futuro bebé, y Liam ante aquel pensamiento no pudo reprimir una sonrisa.
En su cabeza rondó el recuerdo de Zayn diciéndole que era un hombre-B, sintió curiosidad por saber más sobre eso, tomó su móvil y buscó en Google.
El cuerpo de un hombre-B está dispuesto de tal manera que puede concebir a un hijo, y también puede embarazar a una mujer ya que su cuerpo se mantiene mayoritariamente masculino, con sus respectivos órganos.
Por lo general, los hombres-B no pueden ser diferenciados a simple vista, sin embargo poseen ciertas particularidades que los hombres normales no suelen tener, y si se les observa con mayor detenimiento, se les puede reconocer sin tener que preguntarlo directamente.
Los hombres-B se pueden diferenciar porque tienen una cintura pronunciada, aunque sin llegar al grado de la cintura femenina, su piel tiende a ser muchísimo más sensible, por lo general poseen rasgos femeninos, su cuerpo suele ser delgado y de corta estatura, aunque hay excepciones, suelen ser tímidos a la hora de mostrar sus cuerpos, y actuan con más delicadeza que los hombres.
Miró a su novio, sabía que él era más bajo y delgado, pero pensaba que era algo por la diferencia de edad. Fue analizando con su mirada todo el cuerpo que no alcanzaba a ser cubierto por la manta, que era desde la cadera hacia arriba. Miró su cintura, la tenía un poco pronunciada, subió su mirada hasta su rostro, desde siempre admiró las largas pestañas y los gruesos labios de Zayn.
El pelinegro abrió perezosamente los ojos, Liam le sonrió, de repente el menor puso una de sus manos en su boca y se fue corriendo al baño, el castaño lo siguió tan rápido como pudo, pero al llegar al baño lo miró suspirando sentado al lado del retrete.
--¿Estás bien, pequeño? --se acercó y acarició su mejilla.
--Sí, sólo eran unas tontas náuseas --sonrió ladeando su cabeza para que la mano de Liam tocara con un poco más de presión su mejilla.
--¿Hoy vas a querer desayunar? --preguntó ayudándolo a ponerse de pie.
--Tengo hambre, pero no quiero vomitar --hizo puchero.
--Te prepararé algo, ¿Sí? --Zayn le miró sin quitar su puchero. --Solo inténtalo, amor, nuestro bebé debe de estar hambriento --habló apoyando con delicadeza su mano en la barriga del pelinegro y los dos sonrieron.
--Está bien --aceptó y besó a Liam. --Gracias a ti mis náuseas se han ido --lo abrazó apoyando su cabeza en el pecho del castaño, pudiendo apreciar el sonido de los latidos de su corazón. --Te amo --pudo notar como los latidos ahora iban un poco más rápido y sonrió.
--Te amo mucho más, Gatito --besó su frente.
[×]
Liam había buscado en Google un desayuno que a Zayn le gustara, ya que no quería que el chico volviera a vomitar. Miró que desayunar muesli con frutas le sienta bien a los embarazados, así que fue a una tienda, compró los cereales junto con un poco de fruta, y tomó un pequeño tarro de miel, sabía que al pelinegro le encantaba lo dulce.
Ahora ya tenía preparado el muesli con frutas y miel en un tazón, lo puso en una bandeja y fue hasta el salón, donde Zayn abrazaba sus piernas con su cabeza apoyada en sus rodillas mientras miraba unos dibujos animados.
--Zee, tu desayuno está listo --extendió el tazón hacia el pelinegro.
--¡¿Eso es muesli?! --gritó emocionado cuando miró el contenido del tazón.
--Sí --respondió confuso por la actitud del chico.
--¡Me encanta el muesli, gracias Li! --lo abrazó con todas sus fuerzas, mientras el castaño trataba de que no se le cayera el tazón.
--De nada pequeño --sonrió y los dos escucharon a alguien llamar a la puerta. --Ahora come, iré a ver quién es --besó fugazmente sus labios, le entregó el tazón y después de ver la gran sonrisa en el rostro de su gatito caminó hasta la puerta.
Al abrirla miró al rubio apoyado en el marco con una sonrisa radiante.
--¿Qué mierda haces aquí?
--Te dije que os haría unas visitas --sonrió aún más. --¿Dónde está mi gatito? --preguntó entrando en la casa.
--Mi gatito no quiere verte --remarcó el castaño comenzando a cansarse del rubio. --Mira, Aiden, no quiero tener problemas, así que, me haces el favor de irte, gracias --le agarró de los hombros comenzando a llevarlo de vuelta a la puerta.
--Oh, vamos Liam, estoy seguro de que el gatito me extraña --hizo que el castaño le soltara y fue al salón, allí Zayn miraba con un puchero el tazón vacío en sus manos. --Hola gatito.
--Ugh, no, ¡Fuera! --le lanzó el tazón a la cabeza.
--¡Ey! --se tocó en la zona golpeada.
--Adiós Aiden --Liam lo agarró del brazo y lo llevó fuera de su casa.
--Volveré --el castaño le cerró la puerta en la cara y caminó hasta el salón.
--Por cosas como esas es que te amo --se rió el castaño sentándose al lado del pelinegro. --¿Te gustó el muesli?
--Yo también te amo --se sentó encima de Liam. --Me gustó mucho --apoyó su cabeza en el hombro del castaño y aspiró el olor a vainilla que el mayor siempre tenía.
--¿Quieres que te prepare un poco más? Aún queda cer... --la mano de Zayn cubrió su boca haciéndolo callar.
--¿Podemos tomar una siesta? --arrastró las palabras cerrando sus ojos.
--Pero, acabamos de levantarnos... --escuchó unos pequeños ronquidos, sonrió y decidió tumbarse en el sofá. --Está bien, gatito dormilón.
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es corto, lo sé, pero llevo más de un mes sin actualizar y la verdad no me encuentro emocionalmente bien #sad
capítulo dedicado a
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kitten »ziam
FanfictionA Zayn siempre le han gustado los gatos, tanto que un día por carnaval decidió disfrazarse de uno. Le gustó tanto ser un gatito que sigue usando el mismo disfraz. A Liam le pareció adorable la primera vez que lo vio disfrazado de un gatito, así que...