Sarcofágido [JeongCheol]

Sarcophaga carnaria.

-¿Cómo te fue con Joshua?- Pregunto Seungcheol en un dia que había decidido ir para hacerle compañía. No se habían visto en al menos una semana.

-Mal.- Respondió con un puchero y se dejó caer sobre las piernas del mayor, este solo rio y lo abrazo por la espalda, aquellas muestras de afecto se hacían más comunes. -¿para que querías que lo conociera?

-No fui yo- se excusó colocando su mejilla contra la espalda del menor. –Pero me pareció buena idea que tuvieras más amigos, asi no estarías solo, porque esta ha sido una buena temporada y no hemos tenido trabajo.

-Eso es contradictorio.

-No cuando trabajas en una funeraria.

Sonrieron y se quedaron en silencio una vez más, había veces donde no necesitaban decir nada, tenían suficiente con la compañía del otro y eso hacia sonreír a Jeonghan más que otros días.

-¿sabes cuál es el trabajo de Joshua?- Pregunto despues de un rato, sabía que el mayor no tenía ni idea, pero tenía la intención de contarle, asi, si se enteraba de lo ocurrido con el menor podría explicárselo de alguna manera.

-Sí, Mingyu me lo dijo hace unos días...- El ambiente se puso un poco tenso, Seungcheol dejo de abrazarlo y Jeonghan se sentó a un lado. –Me pidió que te convenciera.

-No. – Respondió secamente sin dejar hablar al mayor, no lo miró en ningún momento, solo se dedico a tomar un libro y ojearlo sin prestar atención.

-Lo imaginaba, cuando los presente no tenia ni idea. No quería ofenderte.- Seungcheol actuaba como un cachorro arrepentido, el menor nunca podría resistirse a aquel tono de voz comprensivo que Seungcheol usaba con él. Jeonghan dejo soltar una risa y por fin se miraron fijamente.

-No estoy molesto, es un pueblo y lo chismes se hacen rápido.

-Yo jamás te obligaría a ir...

-Lo sé.

-¡pero!- Habló alzando la voz y sentándose de manera en la que quedaran frente a frente. –Si tienes algo que decir, cualquier cosa, yo estoy dispuesto a no juzgarte. Jeonghan, puedo escucharte.

Jeonghan se preguntó si aquello seguía siendo simple amabilidad, si el chico estaba siendo solo cordial con él o realmente intentaba enamorarlo, pensó que tal vez asi era con cualquier persona, que lo trataba igual que a todos, pero ese pensamiento solo lo alegro más. Se quedaron frente a frente unos momentos, el mayor no quitaba su comprensiva sonrisa y el menor no sabía qué hacer con sus propios labios, los abria para decir algo y regresaba a cerrarlos sin soltar palabra alguna, Choi estaba acabándolo.

-De hecho...- Tomó valor. Su compañero prestó atención e incluso agacho la cabeza incitándolo a continuar, pero su garganta estaba sellada nuevamente. –Hay algo...

Se acomodó el cabello con nerviosismo, nunca pensó estar tan cerca de decirle a alguien aquel secreto, no sabría cómo explicarlo, era difícil si quiera pensar en las palabras adecuadas, se preguntó a si mismo cual era el secreto verdaderamente, él nunca había matado a nadie, jamás había hecho algo que dañara a otra persona...aunque lo intento, pero sus fallos no hacían más que marcarlo como inocente, no había ningún secreto desde su perspectiva. ¿Qué podría decir? ¿Qué besaba cadáveres? ¿Qué los trataba con cariño? No, eso para él no era ningún pecado, de hecho, era algo que debían agradecerle.

Tratar a un cadáver con amor y cuidado era algo bueno, él los respetaba y pasaba cuidándolos en sus últimos momentos, que Jeonghan fuera quien te cuidara despues de morir debería de ser un honor, nadie podría hacerlo mejor que él. Todos deberían agradecerle, cuando una persona del pueblo muriera pasaría con un hermoso muchacho que lo trataría con amor y respeto, e incluso recibiría sus suaves caricias e inocentes besos, no había nada de malo en todo eso.