Hoseok creció. Su cabeza ya tenía cabello y su cara tomó forma de humano. Sus piernas y brazos se hicieron largos y, por fin, ya estaba listo para jugar con Yoongi.
Aunque no eran hermanos de sangre, Yoongi estaba muy feliz de que Hoseok lo llamara hyung. No tuvo que esforzarse por mucho tiempo intentando hacer que Hoseok lo quisiera, ya que él solito había demostrado el gran cariño que le tenía a Yoongi. Y el mayor de los niños se sentía más que deseoso de presumir con todas las personas lo bueno que era su (no) hermanito.
Hoseok siempre quería estar en casa de Yoongi y ni él ni sus madres se enfadaban. Después de todo, sus casas estaban una al lado de la otra.
A veces iban a casa de Hoseok, pero la mayoría del tiempo estaban en casa de Yoongi porque a Hoseok siempre le habían gustado los juguetes en forma de dinosaurio que tenía el mayor, y Yoongi siempre estaba dispuesto a repetirle una y otra vez el nombre de cada tipo de dinosaurio. Incluso cuando sabía que Hoseok lo olvidaría todo al día y volvería a preguntarle una vez más.
Sin embargo, no siempre se llevaban bien. A veces Yoongi hacía llorar a Hoseok por cosas que él ni siquiera sabía que le harían daño al menor. Su madre le había explicado después que él está chiquito y las cosas que le dices lo pueden ofender. En otras ocasiones, era Hoseok quien hacía sentir mal a Yoongi, pero él no hacia un gran escándalo porque él ya es un niño grande y Hoseok no sabe que no te gusta que te digan que tu piel es muy blanca.
Yoongi empezó a ir al jardín de niños y Hoseok quería ir con él también. Y, si Yoongi tuviera que decir la verdad, él también hubiera querido que Hoseok lo acompañara. Pero no podía decirlo. Porque él es el niño grande y él tiene que ponerle el ejemplo a Hoseok.
Cuando Hoseok podía, finalmente, ir al jardín de niños, ya era demasiado tarde. Yoongi ya no estaría ahí, él tendría que ir a una escuela más grande con niños de su edad.
Pero no todo había salido mal. El horario de la escuela de Hoseok no se acomodaba con el de la señora Jung, entonces la madre de Yoongi tendría que cuidar de él mientras ella llegaba de trabajar. Lo cual era genial porque así tendrían cuatro horas seguidas para jugar juntos cada día.
Yoongi había podido observar muy de cerca cómo Hoseok iba creciendo y haciéndose cada vez más listo. Ahora no era Yoongi quien hablaba, ahora él sólo escuchaba mientras Hoseok hablaba hasta por los codos de todas las cosas que había hecho en la escuela, pero Yoongi no se quejaba. Hoseok era simplemente tierno cuando hablaba y Yoongi siempre estaba interesado en escuchar cualquier cosa que el menor quisiera contarle. Tanto era así que incluso cuando Yoongi no los conocía personalmente, ya se sabía el nombre de todos los compañeros de Hoseok.
Mientras crecían, Yoongi notaba los cambios en la personalidad de Hoseok. Notaba cómo el niño pequeño empezaba a forjar su personalidad. Hoseok era siempre alegre y risueño, muy inteligente y con habilidades sociales que un niño de 6 años no debería tener.
La primera vez que Hoseok se lo pidió, fue más como una sugerencia tímida. Hoseok acababa de contarle cómo su mamá le había explicado por qué unos niños grandes se habían besado. El "hyung, ¿nos besamos?" había sido apenas audible para Yoongi, así que simplemente lo dejó pasar, deseando que la cabeza testaruda de Hoseok pronto se olvidara de esa idea.
Pero, claro, no lo hizo. Unas semanas después, se lo dijo de nuevo y esta vez de una manera más directa. Ya no era una pregunta tímida, ahora era una orden desvergonzada. Yoongi había respondido que no, porque eran amigos y Yoongi no quería besar a Hoseok. El mohín y los ojos llorosos seguidos de un grito característico del llanto que ocasionó en Hoseok hicieron que su madre vinera a ver qué le había hecho.
Ni siquiera tuvo tiempo de explicarle lo que había pasado cuando su madre ya le estaba diciendo que se disculpara con el llorón de Hoseok. Sin ganas, se disculpó. Y su madre le advirtió que si volvía a hacer llorar a Hoseok, estaría castigado. Tan pronto como su madre se fue, Hoseok volvió a decirle que lo besara. Y Yoongi en serio no quería que lo castigaran; así que, después de rodar los ojos, se inclinó para juntar sus labios con los de Hoseok. Sólo para retirarse rápidamente. Mientras él estaba ocupado limpiando sus labios con la manga de su camiseta, Hoseok le dijo gracias, hyung de una manera tan adorable que casi hazo que Yoongi quisiera besarlo otra vez. Casi.
Eso pareció volverse una tradición. No había un día en el que Hoseok no le pidiera a Yoongi un beso y Yoongi no quería que Hoseok llorara, así que lo besaba.
Pasaron meses y todo era tan normal para ellos que cada vez que Hoseok levantaba la cabeza de donde estaba coloreando en el piso, levantando sus labios en un gesto parecido a un beso, Yoongi automáticamente se agachaba para juntar sus labios con los de Hoseok en lo que sus inocentes edades consideraban un beso.
Ambos seguían pasando casi todo el tiempo juntos y Yoongi seguía escuchando a Hoseok hablar todos los días. Seguían riendo y jugando juntos, así como peleando y llorando a veces. Y el único factor común que siempre había en sus días era el "hyung, ¿nos besamos?" de Hoseok.
Yoongi había dejado de gruñir cada vez que lo decía.
|NOTAS|
Debería estar haciendo tarea otra vez
🖊️☑️
Recordatorio
Ya está publicado el primer capítulo de la perspectiva de Hoseok en la cuenta de JungH0BI

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Hyung, bésame
FanfictionTodo es tan normal que cuando Hoseok levanta su cabeza de donde esta coloreando en el piso, Yoongi automaticamente se agacha para juntar sus labios con los de Hoseok en lo que sus inocentes edades consideran un beso.