Un Dios Para Este Mundo

Capitulo 4: Mujer Coraje

En los suburbios de una ciudad conocida, como es Detroid, por calles arraigadas al delito y la perversión improvista paseaba un hombre tambaleante por su embriaguez cantando o más bien intentando cantar una canción popular. En un gesto involuntario saca sus llaves y las intruce en un portal que le quedaba justo a la derecha y con dificultad consigue abrirlo.

Subiendo las escaleras un tropezón casi hace que no siguiese su trayecto y llegando a su entrada toco la puerta bruscamente, tras ella su mujer, Amanda, abrió lentamente y espectante ante su estado camino hacia atrás temblorosa. El marido, con una mirada perdida, se abalanzó sobre ella cerrando la puerta de un golpe. En un acto de huida, Amanda corrió hasta la ventana de la cocina y observando la caída de 3 pisos reconsidero el saltar. El hombre prácticamente poseído acometió a golpes a su cónyuge la cual se vio sometida a cubrirse. Recibiendo golpes y en acto de defensa empujó al agresor que debido a su estado resbaló y partiendo la puerta del mueble-bar cayó a suelo entre espasmos. Amanda se acercó cautelosa esperando alguna represalia y cuando estuvo lo suficientemente cerca comprobó que el pomo se adentraba en el cráneo de su marido por la parte posterior causando una abertura que dejaba escapar sangre a borbotones.

El pánico se apoderó de ella en una situación reflexiva, en la cual estaba asumiendo que acababa de matar a su marido. Minutos paralizada desembocaron a que su mirada fija en el cadáver se distrajo en las botellas de Whisky que a pocos centímetros de el quedaban. Se acercó aún conmocionada y con ansia agarro la botella más cercana bebiendosela sin dejar ni gota.

Pocos minutos más tarde rozando las 3 de la madrugada, se encontraba borracha y tumbada al lado del que fue su esposo, hablando sola y con un calor interno que inflamaba sus arterias. Tres golpes en la puerta la hicieron entrar en razón nuevamente y una voz tosca y grave decía ser la policía y advertían que abriesen la puerta o la tumbarian. La adrenalina se vertió en la sangre de Amanda que de un salto se puso en pie. Justo en la misma que miro hacia la puerta escucho al agente mencionar el nombre de su marido y advertir de que venían a por el. La situación desembocó en Amanda tomando su última salida y aún sabiendo su fin decidió saltar por la ventana, quitándose así la vida. Justo al saltar, los agentes entraron y vieron el destrozo, nada más comenzar la caída libre Amanda vio como la pared y la ventana de la que salto se destrozo en añicos. Antes de impactar contra el pavimento, en posición semifetal, comenzó a sentir un calor mayor al anterior y nada más impactar, sintió un leve mareo. Abrió los ojos y se vio en una hondonada de más de 3 metros de profundidad y diámetro, sin lugar a desconcierto los policías desde su piso la apuntaban con rifles de precisión. Aún embriagada se levantó y como si de un toro se tratara, comenzó a correr sin mirar hacia donde iba. Atravesó el pavimento creando una rampa de salida y a paso destructivo derribo todo a su paso.

Cuando abrió los ojos ya se encontraba a bastante distancia del lugar donde ocurrió todo y volviendo a su raciocinio se percató de que varios coches patrulla seguían la pista de lo que había debastado. El acto de astucia decidió entrar por una alcantarilla, aunque el olor era nauseabundo era prácticamente imposible ser descubierta allí escondida. Aún nerviosa por su huida comenzó a caminar por tales subsuelos donde ruidos retumbantes por el eco la obligaban a estar alerta constantemente.

Caminando en la misma dirección se percató del detalle de que no había alcantarillas, por lo que no veía una salida. Un ruido atronador que provenía de adelante la paralizó instintivamente, eso no podía ser una simple rata y comenzó a replantearse las leyendas urbanas sobre los cocodrilos. La dificultad de visión le obligaba a forzar la vista en lo que vislumbro una figura humana caminando hacia donde ella se encontraba. La misma figura cada vez más cerca de aclaraba en su perspectiva, se trataba de un hombre de aspecto algo envejecido que llevaba en la mano una lata de gaseosa. El misterioso hombre dijo con voz segura y sarcástica: "¿Pretendías destrozar media ciudad y que escondiendote aquí no te pillasen, Amanda?"

La chica quedó petrificada al ver que el desconocido sabía lo ocurrido y lo más sorprendente, sabía su nombre. El hombre se plantó a metro y medio de Amanda y con un gesto alegre eructo en dirección contraria de donde provenía, forzando a la chica a esquivar una bola de energía luminosa que levito a gran velocidad hasta chocar contra un muro. Antes de que ella reaccionase el hombre alzó la mano ofreciéndola y a la par de presentó como Idilio. La chica respondió a tal gesto de manera confiada y vigorosa, pues el mismo inspiraba pulcritud. Tras el saludo Idilio aconsejo a Amanda que el próximo apretón de manos fuese más delicada, recolocandose la muñeca.

Siguieron caminando en la dirección de la que venía Idilio y en ese trayecto el le comento el poder que ella poseia y que el mismo y toda la directiva de la Academia y la Liga de Héroes sabían de su existencia. Ella sabiendo ya que su poder era multiplicar su fuerza tras la ingesta de alcohol le comunico que nunca lo supo porque realmente no probó el alcohol hasta ese dia. Idilio le propuso entrar en el cuartel de entrenamiento con el fin de que posteriormente se presentase a la prueba para conseguir el título de héroe y así arreglar sus actos inmorales y rentabilizar su poder ayudando a defender el mundo. Ella dubitativa ante tanta información que asimilar decidió ir con él y posteriormente acepto la opción de entrar en el cuartel.

Tras haber aceptado Idilio saco una botella de Cola Loca(ya sabes, no hay marcas) y se la bebió de un trago. Tras beberla soltó un eructo hacia el muro de su izquierda, abriendo un círculo extraño y del cual salían rayos de luz cegadores. La agarro de la mano y entraron en el mismo saliendo en un páramo totalmente diferente junto a un castillo inmenso de decoraciones antiguas y justo enfrente una gran nave rústica donde había un cartel en el que ponía: "Cuartel de Héroes"...

(Idilio explicó a Amanda el funcionamiento del lugar y la dejo entrenando a la espera de alguna mision)

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