Luna Incompleta

4.- Lidiando con lobos.

La oscuridad lo rodeada, no podía ver nada más allá de sus manos, se encontraba en un lugar donde los sonidos se escuchaban muy lejanos y por un segundo, no sabía que estaba pasando.

Pero unos recuerdos vinieron a su mente, donde podía ver a un hombre con apariencia espeluznante que está luchando con un enorme lobo, uno muy hermoso.

De repente las imágenes desaparecen y lo único que ve es como ese mismo hombre ahora se acerca a él, cuando intentó huir no pudo, sus piernas no se movían, intento pedir ayuda pero no encontró su voz, el hombre ya estaba sobre enfrente de él y no pudo hacer nada.

Este con sus manos rodeo su garganta y empezó a estrangularlo.

Lo único que podía pensar era en Hansol y en lo mucho que quería verlo.

Trato de defenderse, pero su opresor era muy fuerte, tal parecía que no tenía escapatoria.

Dejándose vencer, cerró los ojos y espero su final.

En el momento que pensó que moriría, el peso sobre su cuerpo desapareció al igual que las manos que le apretaban la garganta, abrió sus orbes y se encontró con otro paisaje.

Ahora estaba en un lugar muy hermoso, que no hay palabras para describirlo, todo era verde y con cientos de flores de colores que a su vez era cubierto con unos agradables rayos de sol.

Estaba muy confundido, acaso estaba soñando?.

Cuando estaba admirando el bello cuadro que se presentaba a sus ojos, su mirada fue cautivada por una persona que se acercaba a él, lo impresionante de esto era que no podía distinguir bien las facciones de esta, ya que estaba rodeada por una luz tan hermosa que con solo verla te transmitía serenidad.

Esta persona paro su caminata, hasta estar frente mío y con su bella mano acaricio mi mejilla.

-Lo siento por ese mal sueño...

-No entiendo que está pasando...quien eres tú?.

-Algún día lo descubrirás...pero vengo a ti para advertirte.

-Advertirme sobre qué?

-Vendrán tiempos muy difíciles, donde sufrirás, pero al final tendrás tu recompensa, solo tienes que confiar en el destino y sobre todo en el amor.

-Por qué me dices estas cosas... dime quien eres por favor.

-Recuerda al final serás feliz, solo se paciente... todo lo que pasara será para que se aprenda una lección muy valiosa y lamentablemente tu estas involucrado.

-Por qué?

Ese ser etéreo tomo mi mano y me dio confort, de alguna manera sentía que eso era lo que necesitaba, consuelo.

-Ahora despierta mi dulce Seungkwanie, que te están esperando, ya los preocupaste demasiado.

-Te volveré a ver?

Por alguna razón no quería dejarla ir.

-Quizás no me veas más, pero yo siempre los estoy observando, después de todo ustedes son mis favoritos.

Termino de decirme con unas ligera risa que estremeció mi corazón, ella se alejó de mi donde su luz resplandecía cada vez más, tuve que cerrar los ojos y cuando los volví a abrir observe que no estaba en ese lugar ya, no había un cielo despejado, ahora era una superficie plana de color blanco, un techo.

Lo siguiente que noto fue una voz que lo llamaba por su nombre, una muy familiar.

Cuando por fin pude moverme, enfoque mi mirada a aquella persona que me estaba hablando, que no era otra que Jihoon Hyung, que tenía en sus piernas al pequeño Mok.