Mi boca se cayó al piso al enterarme, miré a Elliot y me lancé sobre él a darle de manotasos como loca.
-¡Eres un idiota! ¡Todo es culpa tuya!- mis padres me apartaron.
-Megan ¡Cálmate!- dijo mi mama
-No me puedes hacer esto ¡Los demandaré!
-Tienes 16 años no puedes demandar.-dijo Elliot con gracia.
-¡Tú cállate, inepto!- dije
-¡Suficiente! Roxana, véte con tus padres y tu Megan a tu habitación, tienes mucho que empacar...salen mañana en la mañana.-dijo mi padre serio
-¿Mañana?- dijimos Rox y yo al mismo tiempo.
-Así es.- dijo el padre de Rox
-Mañana se regresa Elliot a Londres y tú te irás con él.- dijo mi madre ya no queriendo discutir sobre el tema.
-¿Aparte me tengo que ir con él? Por lo menos nos dividen las clases.- dije
-Te equivocas, viajarás en clase turista.
-¿Qué? ¡Yo nunca he viajado en la clase corriente! ¿Por qué?
-Tu padre y yo pensamos que debemos darte una pequeña lección de humildad...
-¿Y la tendré viajando en clase corriente?-dije enojada
-Se llama turista.- dijo Elliot
-¡Yo le digo como yo quiera! Y tú cállate que no tienes porque opinar aquí, empleaducho.
-¡Ya basta! A partir de ahora, total respeto por Elliot o te mandamos a África.
-¿Respeto por Elliot ? ¡Ja!
-Veté a tu habitación.-dijo mi padre.
Le di un abrazo a Perrie y subi las escaleras furiosa.
-No voy a ir a ningun maldito internado. Luego me encargaré de ti James, pero por ahora debo encontrar la manera....¡Lo tengo!
Comencé a hacer mis maletas, pero claro para no ir a ese ridículo internado, definitivamente no iba a ir a ese espantoso lugar. Una vez que terminé de empacar entraron mis padres y Elliot a la habitación.
-¿Ya estás lista?- pregunta mi padre.
-Si, ya empaqué todo.- dije sin expresión alguna.
-Bien.
-Bueno, hija. Descansa, mañana sale tu vuelo temprano.
-Si mami- ''Si como no"
Elliot sonrió yo sólo le hice mala cara. Los tres salieron, comencé a textearle a Roxana. Le conté todo mi plan. Ya eran las una de la madrugada, estaba ''dormida'' cuando me levanté enmedio de la oscuridad. Seguramente todas las puertas de salida tenían la seguridad puesta, e incluso las ventanas pero las puertas del servicio habían de estar sin seguridad. Después de todo pensaban que yo no sabía que existían y aún si supiera no pasaría por ahí.
Me levanté y tomé un bolso ligero, no necesitaba ropa, llevaba mis tarjetas podía comprarme todo un guardaropas nuevo. Bajé las escaleras silenciosamente y llegué a la cocina, me asomé por la puerta de salida del servicio, esta tenía seguridad ¡¡Maldición!! Nunca pensé hacer esto, pero el fin justifica los medios. Entré al baño del servicio cruzando la cocina del servicio y vi que tenía una pequeña ventana que daba para el jardín trasero. Quité todas las persianas y salí por ahi con mucha dificultad. Atravecé todo el jardín trasero corriendo y llegué al portón principal, ahí estaba el portero, debía burlarlo para salir de ahí.
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Diva Adolescente
Teen FictionSi creías conocer la maldad, estas muy equivocada por que la verdadera maldad esta en ella. Que será capaz de hacer solo por obtener lo que quiere? Descubrelo...