Mi chico ideal es... ¿UNA CHICA? 【Yooa y tú】

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Llegué al instituto. Ya era tarde, el profesor ya no me dejaría entrar al salón. Así que me dirigí al costado del colegio, un lugar que donde yo tenía entendido nadie iba.

-¡Aquí tienes tu pastel de cumpleaños! -dijo una voz, y luego se escucharon risas.

Di un paso hacia atrás, escondiéndome.

Fijé mejor mi vista, y pude observar a una chica rubia de espaldas. Mihyun.

Frente a ella se encontraba una persona en el suelo, pero se me hacía imposible ver quién era.

Jiho y Hyojung reían, con unos paquetes de harina, una botella de agua, y una caja que parecía ser de huevos.

Las dos dejaron de reír al notar que Mihyun no reía con ellas.

Todo se volvió silencio, hasta que el tan esperado momento de Jiho y Hyojung llegó; Mihyun comenzó a reír.

-Gracias, chicas. Son las mejores -volvió a reír- Ahora vámonos, ya me estoy apestando con esta basura aquí.

Las tres se fueron riendo, dejando a la vista a la persona a la vista.

Su vista estaba clavada en el suelo. Su cabello estaba lleno de harina y huevo, al igual que todo su uniforme.
Varias gotas caían de su rostro.

-¿Estás bien? -me acerqué, y ella levantó su cabeza para mirarme asustada.

Era Yooa.

Abrí grande mis ojos. Ella se levantó rápidamente y se alejó corriendo, limpiándose las lágrimas con los puños de su uniforme.

Quice seguirla, pero mi cuerpo no reaccionaba.
Estaba petrificada. ¿Yooa sufría bullying?

-¡_____! -alguien gritó en mi oído, haciéndome pegar un saltito de sorpresa. Al ver que yo no contestaba nada, volvió a hablar- ¿_____? ¿Sucede algo? Parece que hayas visto un fantasma -rió Arin.

-Yo... yo -las palabras no salían de mi boca, y Arin me interrumpió.

-Te esperé afuera de tu clase, y me dijeron que no fuiste. ¿Por qué faltaste? -colocó sus dos manos en la cadera, fingiéndo que me estaba rezongando.

-Llegué tarde -dije simplemente.

-Bueno, pues apresúrate o perderás la segunda clase también.

Arin me acompañó hasta mi salón, y se fué.

Cuando entré, no vi a Yooa, ni a Mihyun. Pero sí a Hyojung y a Jiho.

Avancé hacia ellas a paso rápido, sin importarme que todas las miradas estuvieran sobre mi.

-¿Por qué lo hicieron? -reclamé.

-¿Hacer qué? -preguntó Jiho, confundida.

-Ya saben a lo que me refiero -dije firme.

-Oh, así que viste todo -habló esta vez Hyojung-... no es algo de lo que tengas que preocuparte -sonrió falsamente

La tomé de la chaqueta y estuve a punto de golpearla, pero la profesora de biología entro al salón, interrumpiéndome.

-¿Qué sucede aquí?

Las dos fingieron cara de cachorros -_____ estuvo a punto de golpear a Hyojung, profesora -dijo Jiho.

-¿Eso es cierto? -la mayor se dirigió a mi.

-N... -no podía mentir. Era cierto. Asentí con la cabeza gacha- Lo siento, profesora.

-No es a mi a quien debes decírselo.

-¡Pero hay una buena razón!

-¡No existen buenas razones para golpear a alguien! -gritó, provocando que todos brincaran en sus asientos- Discúlpate.