Por Ser Gorda (EDITANDO)

Navidad

24 de diciembre de 2013
Lambare, Asunción.

Me encuentro en la casa de Magalí, mi mejor amiga, hermana de otra sangre, desde los 4 años.
Nos encontramos sentadas en el suelo de su habitación, pintandonos las uñas y poniendonos al día sobre los sucesos de nuestras vidas.
En unas horas más debemos de vestirnos para la cena familiar. Es la primera vez que pasaré navidad lejos de mi familia realmente, estoy un poco nerviosa. De todas formas me siento bien.

Josué y yo no escribimos más, supongo que por que no hay señal por su zona, igual no me preocupo, toda mi atención está en Magalí.

Ella y yo nos vemos dos veces por año prácticamente, cuando vivía por Lambaré, todos los días, pero como que mi familia y yo nos mudamos a San Lorenzo, que queda a una hora de distancia, no es tan constante vernos pero gracias a Dios, con ella nunca perdí contacto y hablamos siempre como si fuera que nunca me fui de acá.
Es mi hermana de otra sangre. Hermana de otra madre, hermana de vida.

Derrepente, María, su hermana menor y por lo tanto mi amiga/hermana también irrumpe en la habitación donde nos encontramos. Ella es alta, bastante, tiene el cabello en un corte carre y totalmente negro. Su estilo es tan... María.

- Mamá quiere que bajen para estar con la abuela. - Nos dice mientras se tira en su cama con su móvil y auriculares. Es una genia con la tecnología.

- ¿Y vos? ¿Por qué no estás con la abuela también? - Le responde Magalí.

- Estaba con ella, es el turno de ustedes. - Replica María rodando los ojos.

- Vamos, total, tengo sed. - Le digo mientras guardo los esmaltes en la canasta. Ella se levanta soplando sus uñas y me señala donde debo colocar la canasta. Suspira y se adelanta, mientras yo la sigo.

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La abuela Eustaquia, es en realidad muy simpática. Hablamos mucho con ella mientras tomabamos solamente agua.
Derrepente Maga mira su reloj en la muñeca y dice que es hora de bañarnos, pero su mamá, irrumpe en el lugar.

- Tu tía Inés llamó, quiere que vayamos justo ahora, habilitó la piscina para que puedan entrar un rato, antes de la cena. ¿Qué dicen? María ya está preparándose. - Sonríe Sandra.

- ¡Que bueno! ¿Porqué no? ¿Verdad Jacqueline? ¡Vamos a bañarnos! Aunque era justamente lo que ibamos a hacer, ¿no? - Se levanta rodando los ojos con una sonrisa en el rostro.

- Sin drama, vamos. - La emujo levemente con mi hombro.

- Enseguida volvemos abue - Voltea hacia la abuela.

- Vayan. - Dice sonriendo.

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- No tengo traje de baño. - Digo haciendo un puchero.

- Creo que tengo uno por acá. - Dice frunciendo las cejas y buscando entre sus ropas. Suspiro, no creo que encuentre algo que me quede, ella es obviamente, pequeña y bueno, yo no.

- ¿Me va a quedar?

Ella voltea luciendo enojada.

- Obviamente que sí, ¿cuántas veces debo decirte que no tenés porqué acomplejarte de tu cuerpo? - Y voltea nuevamente en la búsqueda.

Volteo los ojos.

- Es difícil.

- ¡Acá está! - Grita sobresaltandome, y lanzandome al mismo tiempo lo encontrado, lo tomo en mis manos y lo extiendo frente a mi. Es una maya de color rosa y en la parte de los senos con detalles de rositas. Es lindo, y grande. Creo que esto sí me va a ir. - Anda bañate ya y ponete eso que papá se apura y sabes como es. - Dice eso con sus manos en su cintura y rodando los ojos, ella ya está cambiada. Río, amo a esta chica.

- Graciaaaaaaaas, love you. - Le lanzo un beso mientras voy al baño.

Minutos después...

Creo que esto se ve bien, literalmente, solo me veo como yo misma, y eso está bien supongo. Salgo del baño con el vapor detrás de mi, tengo tanto calor.
Al llegar a la habitación veo a Magalí con su celular en manos y su mochila, busco la mía con la mirada y antes de que pronuncie una palabra, escuchamos.

- ¡Vámonos! - Es la voz de don Manuel, papá de Magalí.

- Justo a tiempo- responde ella.

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Ha pasado un par de horas y siento mi cuerpo como una pasa de uvas. En la psicina estamos Magalí, María, su hermano menor Martín y su primo Fernando, de la edad del anteriormente nombrado.
Y creemos que ya es hora de salir porque son casi las ocho de la noche, primero salen María, Martín y Fernando. Magali y yo quedamos un rato más, queremos quitarnos fotos.

Primero empieza ella, me da unas cuantas poses y ya, soy yo realmente la emocionada por una buena foto para mi perfil de Facebook.

Mi turno, ella solo me da indicaciones de qué gestos debo hacer y ya está.
Obviamente tengo que editar esas fotos.
Salimos de la piscina para ir a ducharnos y vestirnos ya. Nos vamos al fondo y ya se puede ver la larga mesa con los utensilios debidamente en su lugar. La señora Inés y Sandra colocando las ensaladas en medio mismo de ésta, y don Manuel verificando si el asado y demás tipo de carnes ya están listos, todo huele tan bien.

- Entra, es mejor entrar las dos así ahorramos tiempo - Dice Magali, entonces entro y ahí mismo empezamos a turnarnos en la ducha, unos minutos después las dos estamos listas. Y salimos.

Vemos a la familia un cerca de la piscina, sentados en sillones rústicos, y nos vamos junto a ellos.
Sandra al vernos dice:

- Ahí en el refrigerador hay sidra, por si quieran tomar un poco.

- Pero solo un poco porque las dos aún son muy pequeñas. - Dice sonriendo su papá.

- Papá... - responde Magali rodando los ojos y me agarra del brazo para dirigirnos al refrigerador mientras sus padres, tía y abuela ríen.

- ¿Si le ponemos un poco de Pepsi? - Murmura ella mirandome con la copa de sidra en las manos.

- Lo que sea, yo solo tengo hambre. - Digo acariciando mi panza y ello solo ríe mientras hace la mezcla obviamente innecesaria.

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De un momento a otro, las horas pasaron rápidamente, y entre risas y brindis se hizo las doce, e inmediatamente escuchamos los sonidos de pirotecnias y empezamos a agredecer y de paso brindar.
Procedimos a quitarnos fotos para luego seguir con la cena.

En un momento dado siento mi celular vibrar, bajo le mesa, desbloqueo para ver de quien se trata y cuando veo su nombre mi corazón empieza a latir rápidamente.

Josué Garay
¡Feliz navidad Jacque! 💕
Espero que la estes pasando bien. 😚
Salud 🍷

Sonrio completamente embobada.

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Quizás no sea el capítulo más emocionante que haya escrito pero con esto significa que volví a ustedes.
No les voy a mentir, ya no quería seguir la historia por el simple hecho de que ya no me nacía pensar en el pasado realmente (ya que esto está basado en la vida real) pero tras algunas situaciones recientes mis ganas volvieron y aquí estoy.

Disculpas sinceras.

Gracias a las que siguen esperando y las que leen recientemente, en realidad lo agradezco. 💕

Un beso grande para todas. 😚

Solange V