El Destino que Comencé a forjar

CAPITULO 33 Mi elección. ¡¡¡¡¡Final!!!!

Hare unos extras de este fic y una segunda temporada, gracias por su apoyo

---Hiroki---

-¿Hiroki? –me miro Ald.
-Necesito un poco de aire fresco. –trate de sonreír.

Salí corriendo del palacio en rumbo a la plaza, trataba de contener mis lágrimas, amo tanto a Ald, en verdad me enamore de él por completo, pero si decido volver a Japón me tendré que separar de él, ¿Qué rayos se supone que debo hacer?

-Hiro-san. –dijo Nowaki mientras se acercaba a mí.

-¿Nowaki, que haces aquí? –cuestione.
-Te estaba buscando porque quiero hablar contigo. –me miro seriamente.
-Está bien, vamos. –conteste mientras caminábamos hacia unas bancas.

---Ald---


-Ald, ¿te encuentras bien? –pregunto Raven.
-¿Eh? O sí, claro, dime que pasa. –comente.
-¿Por qué esta distraído?
-Estoy buscando una solución. –sonreí.
-¿Solución? ¿Para qué?
-Para estar con mi ángel.
-¿De qué habla?
-Te lo explicare...

---Nowaki---

Desde hace mucho supe que lo perdí, cada día parece estar más enamorado de Ald, supongo que tuve la culpa al ocasionar que se alejara de mí, ¿Por qué no lo escuche? Ya para que me pregunto, si aunque me dé la respuesta no lo tendré a mi lado. Aunque por una parte me gustaría que me lo dijera de frente para poder alejarme y no ser una molestia en su relación.

Camine por la plaza y lo encontré, estaba muy concentrado, como si pensara en algo importante.

-Hiro-san. –sonreí y me acerque a él.
-¿Nowaki, que haces aquí? –pregunto.
-Te estaba buscando porque quiero hablar contigo. –lo mire seriamente.
-Está bien, vamos. –contesto mientras caminábamos hacia unas bancas.

Nos sentamos y respire profundamente.

-Hiro-san, tú sabes que te amo más que a mi propia vida.
-Nowaki...
-Solo déjame continuar y escúchame. –comente.
-Está bien. –asintió.
-Desde el primer momento en que te vi me enamore de ti y me jure que te haría feliz, haría que tuvieras siempre una sonrisa, porque no me gustaría verte llorando, cosa que no cumplí por ser tan inseguro y no creer en tu amor, -lo mire- es por eso que ahora te pido que seas honesto y me digas todo lo que sientes.
-Yo...
-No te detengas por nada Hiro-san, por favor quiero escucharte. –lo tome de la mano.
-Nowaki yo te amaba tanto, como nunca imagine amar a nadie, pero, -suspiro y empezaban a caer lágrimas por sus ojos- lo lamento Nowaki pero yo me enamore de Ald como un loco, no pensé llegar a amarlo así, él es mi felicidad y es la persona con la que quiero estar.
-Lo entiendo Hiro-san. –limpie sus lágrimas- gracias por ser sincero conmigo y decirme lo que sientes, por favor no llores más, no vale la pena hacerlo, la culpa la tuve yo, yo te arroje a sus brazos.
-Nowaki...
-Quiero que sonrías Hiro-san y que tú mismo forjes tu propio destino. –sonreí.
-Gracias Nowaki.
-No tienes nada que agradecer Hiro-san, solo no me dejes de lado, y hablemos de vez en cuando, tal vez una salida como amigos. –sonreí conteniéndome las ganas de llorar.
-Si eso te hace bien lo acepto. –comento.
-Sí, me encantaría. –lo abrace.
-Gracias Nowaki ahora tengo que ir a forjar mi destino. –sonrió.
-¿Cómo? –me confundí.
-Yo mismo me entiendo. –se despidió.

Camine de vuelta donde se encontraba Akihiko y Misaki.

-¿Cómo te fue Kusama? –pregunto Usami.
-Él ya tomo su elección. –limpie mis lágrimas que empezaron a salir.
-Sé muy bien que tú también encontraras tu felicidad.
-Tal vez. –sonreí "pero aun así, mientras haya esperanzas, seguiré luchando por el amor de Hiro-san"

---Hiroki---

Corrí de nuevo hasta el palacio y me encontré con Ald en la entrada.

-Mi ángel ¿estás bien?
-Ald, eres la persona a la cual yo amo y quiero estar siempre contigo, pero, creo que me hace falta terminar algunos asuntos en Japón, y es por eso que te pido que me esperes, que volveré.
-Claro mi ángel. –susurro y me beso.

Al día siguiente empecé a empacar mis cosas para volver a Japón, Ald me ayudaba y me dijo que no me podría acompañar al aeropuerto ya que el comité necesitaba hablar con él, así que me beso profundamente...

Damon y Raven nos acompañaron a mí, Akihiko, Misaki y Nowaki hasta el aeropuerto. Nos despedimos de ellos, y les prometí volver lo más pronto posible.

Tomamos el avión, y el viaje aunque fue corto, se me hizo muy pesado y largo.

-No me digas que ya lo extrañas. –comento Akihiko mientras me pasaba mi maleta.

-La verdad sí, me hubiera encantado que viniera.
-Entonces, ¿Por qué no me lo pediste? –comento una voz conocida para mí.
-¿Ald? –me sorprendí.
-Hola mi ángel, estoy feliz de verte.

Sin pensarlo dos veces lo abrace fuertemente, y el correspondió a mi abrazo.

-¿Por qué no me dijiste que vendrías? –cuestione.
-Era una sorpresa.
-¿Y tú reino? –entre en pánico.
-Digamos que luego de hablar con el comité, deje mi reino en manos de Damon y Raven, ellos se encargaran de todo, hasta nuestro regreso o hasta que cumpla 30, lo que pase primero. –sonrió.

---En algún lugar desconocido---

-¿Y cuándo atacaremos? –comento una voz.
-Supongo que les daré un breve tiempo de paz, -suspiro un hombre sentado en una silla- cuídate muy bien Ald, a ti y a ese castaño que fue la perdición de William.
-¿También lo eliminara?
-Tal vez me divierta con él, no está mal, y es de mis gustos, supongo que él es como la maldición de los príncipes. –rio.

---En el aeropuerto---Hiroki

-Eres un Baka. –hice un puchero.
-Tal vez, pero aun así me amas. –sonrió.
-Sí, así te amo. –lo bese.

No tenía pensado enamorarme cuando llegue a ese reino, pero con Ald descubrir nuevas cosas de mí que no conocía, volví a sonreír y a ser feliz...

Los recuerdos que tengo de Nowaki los atesorare de por vida pero ahora mi corazón solo le pertenece a Ald, y así será siempre...


DESDE AHORA EMPEZARE A FORJAR MI PROPIO DESTINO