1-Como comenzo

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Hoy con diecisiete años comenzaba el 5 año de secundaria estoy muy feliz por que no tendré que pensar tanto en el problema de mis padres, si se van a separar, para mi es mejor, mi padre parece un demonio.
Con mi madre nos vinimos a vivir a un pueblo para empezar de nuevo, olvidar todo y estar felices.
Cómo decía mi madre me anoto en una secundaria o mejor dicho la única escuela de este pueblo pero no he visto chicas, si son puros hombres, ojalá allá alguna ...
-Alisa- escuche la vos de mi madre ya habíamos llegado mire al costado y ahí estaba ella sonriendo, triste,-Alisa  Human , ¿Me escuchas?.
-Si madre.
-Vendré el fin de semana por ti - dijo GENIAL pensé lo que me faltaba me puse sería- Por favor Alisa- dijo tocando mi mejilla- todo va a estar bien.
Le sonríe falsa y baje del auto por lo menos eso nos había quedado.
En la entrada habían muchachos, sentí que me miraban voltee y era un chico lindo, no lo podía negar, pelo negro, morocho y sus ojos eran negros profundos, pero no pensaba en chicos ahora entre y me dirigí hacia un pasillo, sentí que alguien me tocó la espalda me giré y era una chica rubia ojos azules intensos, me sonrió.
-Hola soy Ana- dijo estrechando su mano me la quede viendo - ¿Y tu eres?-dijo sonriendo tímida.
-Ay.. si lo siento soy Alisa- dije tomando su mano.
-¿Eres nueva?- dijo me la quede viendo iba a responder pero ella se adelantó- Perdón es obvio es que somos muy pocas aquí y no me llevo muy bien con las otras chicas- dijo sonriendo.
-Ah ¿sabes donde podría encontrar a la directora?.
-Si claro ven-dijo tomando mi mano y prácticamente arrastrándome por el pasillo.
Llegamos a una puerta y ella golpeó dos veces se escuchó una vos que nos dijo que pasáramos.
-Buenos dias chicas ¿Que necesitan?
-Ella es Alisa..
-Human- la interrumpió la directora.
-Esa soy yo.
- Bien le daré la llave de su dormitorio le tocará con Ana ya que ella está sola.
-Excelente- dijimos las dos y reímos.
Me entregaron la llave y nos dirigimos a la habitación era muy bonita acomode todo y nos pusimos a charlar de nuestras vidas.
Por lo menos no estaré sola...

Ya no soy la misma de antesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora