Ya no soy la misma de antes

18-

Estábamos en una reunión, los demonios se acercaban y no estaban solos se le habían unido otros seres y lo peor no sabía quién o qué eran.
Los demonios habían sido localizados, todos pensábamos que sería mejor que ellos vinieran a la guerra acá pero luego de discutirlo pensamos lo mejor, los demonios no eran como los lobos o las brujas, ellos arrasaban con todo y si llegaban a ver la gente, ellos, si... los matarían.
Nos pusimos de acuerdo y íbamos a irnos a su encuentro nos preparamos y salimos en marcha, todos llevábamos pistolas de luz, era la debilidad del demonio los lobos íbamos convertidos, por que así somos más fuertes y ágiles, voy al mando, y no hacemos ruido, la nieve cae y el frío aumenta, casi ni lo siento, paramos en seco al escuchar una rama quebrarse el bosque se queda en silencio, escuchaba latir mi corazón y otro al mismo tiempo era un ser que me llenaba, mire a mis lados y lo sentía más fuerte, no eran mis compañeros.
Les di la señal que no se movieran, di un paso y la niebla nos cubrió, eran los demonios.
Los chicos se acercaron a mi y los encaramos, podía oír las risas crueles y sin piedad, los llantos de las almas que ellos habían arrebatado.
Me convertí normal.
Uno de ellos se acercó, no tenían ojos eran negros y un aspecto frío, me sonrió malvadamente quedando a un paso de mi.
-Hola un gusto ¿no?- dijo con una vos fría y ronca.
-¿Que quieren?- dije y escuche los sollozos de mis compañeros que tenían miedo.
- A ti...- dijo y camino hacia una loba tomando su cuello y apretándolo.
-No la toques - dije firme el la soltó y me miró con una sonrisa malvada.
-Entrega te- dijo frío.
-No lo hará - dijo Tomás apareciendo detrás mío.
- Que dulzura- dijo riendo, y cambiando rápidamente a cruel - No podrás protegerla.
-Eso es lo que tú crees - dijo Tomás poniendo sus ojos rojos puse mi mano en su pecho para que se calmara.
-No te tengo miedo - dije dando un paso quedando frente a frente con el demonio el se sorprendió y se enojó.
-Eso es lo que tú crees Alisa- dijo y río cruel.
-¿Como sabes mi nombre?- dije mostrando firmeza.
-Tu madre te llamaba a gritos - dijo riendo cruel.
-¿Mi madre? !!¿¿Donde la tienes!!!!??- dije con rabia.
-Caro- dijo llamando y vi asomarse a una criatura nunca vista, era sin ojos pero forma de Hada- Saluda a tu hija.
- Que?- dije con furia.
-Alisa- dijo fría.
-Esta no eres tu- dije fría. El río malvadamente.
-Caro ¿Por que no le das una bienvenida a tu hija?- dijo frío dándose la vuelta y perdiéndose de vista entre los otros demonios.
Ella me sonrió cruel y con un chasquido todos los demonios se nos acercaron.
-Que comience la fiesta- dijo.
Empezamos a pelear con las armas, ella me tomo del pelo y me tiro al piso pude ver a Valery pelear y de un momento le sacaron el alma quedando seca en el piso, mire al otro lado y pude ver el hermoso pelaje de Ana en el suelo, mis ojos se cristalizaron, me golpeó lanzándome a un tronco y vi que a Agustín le quebraban el cuello, Tomás siendo atacado por dos demonios.
-Eres débil - dijo riendo.
-No te tengo miedo - dije débil.
-Ni tu te crees- dijo malvada.
Me paré de golpe y ella me miró asombrada, con mi mano la empujé, callo en un arbol, mi furia me llenó y grite de furia y tristeza un "no" y los demonios fueron triturados las almas se liberaron, me arrodille y escuche sus corazones, todos los corazones latir.
Cerré mis ojos y caí.