Ƴσ Sσℓσ Qυιєяσ Ƭυ Aℓмα

193 16 2
                                    


La mañana por fin había llegado, me levanté y me prepare para el posible trabajo que tendría en un rato más. Esperé pacientemente a que fuera hora de ir a despertar a mi amo, cuando la hora llegó, me dirigí hacia la habitación en la que se encontraba, y como era costumbre mía, le llevé un poco de té.

Estando frente a la puerta, me detuve un poco a pensar. ¿En dónde se encontrará la habitación de esa joven alma? es evidente que quiero oler de nuevo ese delicioso aroma, pero este no es el momento para pensar en eso. Entré en la habitación, estaba muy oscura, me dirigí a hacia las cortinas y las abrí, dejando que la luz del día invadiera completamente la habitación.

- Su alteza, es hora de levantarse- moví un poco a mi amo, el cual, al percibir la luz del día, se dio la vuelta cubriéndose completamente con las cobijas.

- Maldita araña, te he dicho varias veces que no hay necesidad de que tu vengas a despertarme, me levantaré con la alarma de mi celular, así que vete y déjame dormir otro rato más- el joven refunfuño debajo de las cobijas, sin duda es alguien terco.

- Pero Su alteza, si hago caso de lo que me dice se que no le hará caso al aparato electrónico y seguiría durmiendo en estos momentos.  Además de que todos lo verían como un claro ejemplo de disciplina - el solo se quedó callado por un momento

- Hoooo si Claude, tienes muchas razón, debo dar una buena impresión a mis sobrinos - después de unos segundos se levantó de la cama rápidamente de un salto, siempre que quiero que se comporte trato de subir su ego.

- Tome - le dí la taza con el té que le gusta.

- Por cierto ¿Qué hora es?

- Son  - para ver la hora saqué el celular que él me había dado, según para dejar ese estilo victoriano y adaptarme a la actualidad, cosa que todavía no me acostumbro a usar - 7: 15 Su alteza.

- Es temprano todavía, pero es viernes supongo que mis sobrinos irán a la escuela ... por cierto ¿A qué hora comienzan las clases en esta zona?.

- No tengo idea alteza, en los únicos lugares en los que he estado son en Inglaterra, después en Alemania, Rusia, Turquía, Suiza y por último en México donde me encuentro cumpliendo con nuestro contrato.

- Si que has estado en muchos lugares- dijo antes de dar un trago a la taza- quiero, que te ganes la confianza de mis tres sobrinos, trata de hablarles acerca de mi, diles que mis intenciones no son malas, como anoche con _____,- mi corazón se estremeció un poco al saber el nombre de la joven- primero quiero ganarme la confianza de los tres, y después, tal vez aliarme con ellos en el negocio, también quiero sentir esa calidez que una familia unida tiene.

- Si así lo desea.

- Gracias Claude, puedes retirarte- hice una reverencia y salí de la habitación.

iba de camino a la cocina, cuando ví lo lejos al señor Leopoldo, el mayordomo de esta familia, iba caminando apresurada mente, al verme se dirigió hacia mi.

- Buen día señor Claude.

- Buen día señor Leopoldo, se ve un poco apresurado, ¿puedo ayudarlo en algo?- pregunté, ya que no me quedaba de otra más que ayudar al hombre, al oír mi pregunta le brillaron los ojos.

-De hecho si señor Claude, me seria de mucha ayuda si usted fuera a ver si los tres jóvenes ya se han levantado, en lo que yo preparo unas cosas del señor y la señora. Sus habitaciones están en el segundo piso a la izquierda.

- No se preocupe, yo lo haré.

- Muchas gracias señor Claude- tras decir eso se fue a paso rápido hacia el despacho del señor.

No Puedo Evitarlo... Simplemente Me Gustas ~ (Claude x Lectora)[PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora