Aquí estoy yo

~09~

Me levante Feliz, ¡estaba completa! aunque no había dormido en toda la noche por pensar en que decirle a Christopher, me sentía en las nubes, sabia que su idea de casarnos había salido de la nada, pero sabia también que había salido de corazón y sus ojos era su mayor verdad.

¡Quería casarse conmigo! con la camarera de su hotel, Con la pobre, con Dulce Espinoza y no con alguien de su rango... Mi corazón latía de solo pensarlo y me recordaba sus palabras “no hay no por respuesta” que tontito era, pero tan maravillosamente perfecto, ¿que tenia que hacer? Aceptaba, me la jugaba y volaba como quería hacerlo…

Hable en voz alta

- ¡basta! Vas a llegar tarde, por estar pensado a algo que sabes que cuando lo mires de nuevo, tu respuesta será: ¡si, si si!! – Sonreí- ¡Ayyyy me voy a casar!

Tome la ducha, me arregle y Salí a preparar el desayuno para dejárselo a mi padre, que seguro llego bien tarde porque no lo había escuchado llegar ¡que estupida enamorada estaba que nisiquiera mi mundo exterior exista cuando pensaba en el!

Cuando Salí a la sala y me dirigí a la cocina me dejo la impresión que todo estaba igual de cómo lo había dejado la noche anterior, ¡que raro!, Cuando llegue a la cocina me di cuenta que mi padre no había tomado bocado de la cena, ¡ahora si que no entendía nada! ¿No había comido? O ¿no había ido a dormir?, Para descartar mis dudas me dirigí a su habitación, cuando llegue a ella… si que me asuste, la cama estaba hecha y sin rastro de que alguien hubiera dormido allí ¿que habría pasado? ¿Tomaría doble turno? ¿Tanta gente había ido a la fiesta que no se quiso regresar y se expuso a trabajar horas extras?, bueno llamaría a la recepción tenia que sacarle las respuesta a alguien.
Cuando ya casi llegaba al teléfono, tocaron a la puerta, seguro era su papa, ¿que le pasaba? ¿Sin comer, sin llegar a casa y dejar las llaves perdidas? ¿Estaba enamorado o que cosa? ¿Estaba enamorado como ella? Bueno, todo podía pasar y ojala que si fuera eso, sonrío por sus pensamientos y cuando abrí la puerta mi sonrisa se esfumo porque ver la cara de Christopher pálida y mirándome con angustia fue ver mi destino llamándome con anticipo

Su papa. No había otra respuesta

- ¿donde esta? – sin dudarlo le dijo

Me tomo de mis manos

- Dulce, quiero que te calmes…

Ya mis lágrimas empezaban a derramarse, sin saber lo que ocurría, sabia que era mi papa 

- ¿que paso?

- esta en el hospital, sufrió un accidente…

Me lleve las manos a mi boca, para ahogar el grito que quería salir de  todo mí ser, ¡no!, mi papa no, ¿Por qué? ¿Que hizo?

No podía estar pasando aquello, tenia que ser un error, no supe si le dije algo mas a Christopher, solo veía como me tomaba mis hombros, me  miraba con angustia y me abrazaba como si se le fuera la vida en ello, se que era mi voz la que hablaba pero no entendía que yo decía… ¿ quería a mi papa? No quería nada mas, solo quería verlo y saber que iba estar bien.

La angustia que sentí verlo allí en esa cama, fue lo peor en mi vida, ¡nunca nadie me preparo para esto!, nunca nadie me dijo que a veces, no todo puede ser felicidad. Mi padre estaba muriendo y según el doctor no se podía hacer nada, ¿como podía yo soportar algo así? ¿Como podía yo resignarme a perder a la persona mas importante en mi mundo?, sin el mi vida seria pequeña y sin razón. Mi padre era mi lucha. por el, es que era lo que soy hoy, ¡no! no podía aceptar perderlo y sin que nadie me anunciara que iba a ser así.

Corrí a donde estaba y al llegar a el lo abrase. Comencé a llorar como nunca. Solo supe que sabía que estaba allí cuando me toco con su mano mi cabello y empezó a sobarlo como cuando yo era niña.
Siempre lo hacia cuando estaba triste, la mayoría de las veces cuando me sentía sola y sin una madre a mi lado, su toque me hacia sentir segura, me indicaba que todo iba estar bien, pero este toque era diferente… supe que iba a ser el ultimo, el definitivo y yo no quería que terminar. ¡No lo quería perder!

- no te vallas por favor…te necesito

- te amo, hija

Lo mire

- y yo a ti papa

- sien…to, no habe…rte dado lo que te mere…cias, ten…ia que haber…telo dado antes para…
- pa…pa – tocándole su mejilla – me diste lo más importante, amor – sonriéndole-

Tosió y le hizo señas a Christopher que se acercara

- ¿lo lograste?

- si, señor – saco un medallón de uno de sus bolsillos y se lo tendió a mi padre-

Mire el medallón maravillada

- hija, esto te perte…nece, quiero que lo lle…ves y por nada del mun…do te lo qui…tes, se que lleva…rlo ha…ra que al…gun dia pue…das encont…rar tu des…tino

Llore no podía decir mas nada ¡se estaba despidiendo de mi! ¡No quería eso!

- prométeme que lo llevaras…

- lo prometo

Me lo coloco en mi cuello y al tenerlo en mi pecho lo aferre en mi mano, ¡nunca iba a soltarlo! ¡Nunca!

Lo abrase de nuevo

- te quiero

Miro a Christopher para que se acercara de nuevo, tomo su mano y la llevo junto a la mía

- Espe…ro que la – tosio- hagas fe…liz, porque se lo merece

- lo se, y será la mas feliz, me casare con ella y desde donde este usted vera los nietos que todo abuelo quiere… ¡es una promesa!

- ¿hija lo quieres?

- si – mirando por primera vez a Christopher desde que entre a la habitación

- enton…ces la prome…sa es doble… se feliz, ¡te amo!

Y fue su último suspiro, su última palabra, su última sonrisa, porque fue así que se marchó con una sonrisa sabiendo que yo iba a ser feliz a pesar de su ausencia.

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