Christopher entró a su depto después de un agotador viaje a Santa Rosa, su primera acción fue dirijirse a su cuarto a dejar los bolsos. No se había percatado de la ausencia de Aoi y Lya. Introdujo la llave en el cerrojo e intentó girarla, enseguida notó que se trababa...La puerta estaba abierta.
-Mierda!
Entró rápidamente a la habitación y prendió su tablet, luego accedió al programa conectado a las cámaras de seguridad de su cuarto, acelerando el video vió como las horas pasaban sin que nada ocurriera hasta que de repente entraron Aoi y Black a la habitación, - a lo mejor querian estar solos- pensó Chris. Estaba por cerrar el programa cuando vió que los chicos empezaban a revisar sus cosas, miró atentamente cada movimiento hasta que vió a Aoi abriendo sus cajones, hizo zoom, le provocó una risita traviesa cuando la muchacha se sonrojó al ver sus calzoncillos. Luego la observó sacando un papel y enseguida vino a su memoria la carta de los padres de las chicas, se angustió, yal ver llorar a la muchacha se puso pálido de la tristeza. Continuó observando y abrió los ojos como platos cuando Aoi encontró el bolso lleno de dinero.
-No, no,no!!
En ese momento vió a Lya entrar a la habitación y acercarse a Aoi, la vió observar los cuadros y el dinero...la vió observar la carta.
Recordó lo que decía en la carta y sintió un pinchazo en el corazón, en ese momento escuchó la puerta y luego el televisor. Las chicas habían llegado de donde fuera que habían ido, apagó la tablet y se dirijió a la cocina. Las chicas estaban sentadas en el sillón frente a la tv haciendo zapping, se acercó y la apagó
- Chicas...Tenemos que tener una charla