Dark || Harry Styles || Español [TERMINADA]

CAPÍTULO 58

58.

Cuando la luz irrumpió a través de los pequeños espacios a ambos lados de mis cortinas estiradas, mentalmente enumeré otra noche de sueño interrupido. Mis manos buscaron en el lugar vacío que alguna vez había sido ocupado por alguien quien ahora su imagen era dolorosa para conjurar en mi mente. Tenía una especie de odio hacia él por eso.

Los días se mezclaron, inseguro si era un día laboral. Un rápido vistazo a la pantalla de mi teléfono me confirmó lo que era en verdad, domingo. Suspiré, cayendo de vuelta en el desorden de ropa de cama contra la que luché durante la noche. Esperaba que el sueño que estaba dispuesto a recuperar sería sin sueños, algún lugar donde podría escapar de él. Pero mi madre tenía otras ideas.

"Buenos días."

Gruñí, intentando taparme aún más en la cama. Peso hundió el colchón, su mano descansando en hombro cubierto por el edredón.

"Bo, vamos. Me lo prometiste."

Su tono era suave, pero el sentimiento tenso. Ella estaba cansada de mi estando refugiada en mi cuarto, y yo estaba cansada de estar allí. Por mi cuenta. Me comprometí al menos estar un día entero limpia y completamente vestida.

"Te traje algo de té."

Me asomé desde mi escondite, descubriendo una taza humeante en mi mesita de noche. Necesitaba ordenarla.

"Gracias."

Me senté, tomando los edredones arrugados conmigo. Mi mamá permaneció como un pisapapeles, frenando mi esfuerzo de tirar la manta hacia arriba y por encima de mi cabeza. Ella sabía que mis intenciones inclinándose hacia enterrarme a mí y a mis problemas.

"Deberías levantarte, está un poco fresco, pero el sol está afuera."

"¿Y hacer qué?" Escupí.

Su sonrisa se fracturó con mi no provocada respuesta. Sentí una punzada de culpa tan pronto como las crueles palabras dejaron mis labios. Pero ella era mi mamá, ella entendía que a pesar de todo el progreso realizado, incluso algo pequeño podía dar en la llaga y estaríamos retrocediendo días cuando no quería abandonar las cuatro paredes de mi cuarto.

"Pensé que podíamos ir de compras, o a esa cafetería en el parque que te gustaba cuando eras pequeña. O si no quieres hacer eso, podemos dar una vuelta e ir a caminar a algún lado."

Ella estaba intentándolo, desesperadamente. ¿Pero qué iba a lograr un paseo? La fisura agrietando mi voluntad sólo estaba haciendose más profunda.

"No se qué hacer."

La sonrisa de mi mamá estaba llena de esperanza.

"Bueno, no tienes que decidir ahora, desayuna y nosotras..."

"No," meneo mi cabeza, lágrimas rebozando. "Mamá, no se qué hacer."

Entendimiento se estrella mientras era tomada en sus brazos. Era el mismo tipo de abrazo que recibiría luego de rasparme mis rodillas por caer de la rotonda en el parque cuando tenía seis. La misma comodidad cuando ella acariciaba mi cabello. Aunque, ahora preferiría el dolor de una rodilla raspada en lugar de lo que estaba sintiendo ahora. Entraría en una ronda del cuadrilátero si pudiera noquear los sentimientos sin esperanza situados en mi estómago.

"Oh, Bo," Ella dijo arrullandome.

"Lo extraño."

"Y eso está bien. No tienes que olvidarte de Harry."

 Ella me hizo callar mientras me rompí en feos sollozos. Probablemente estaba arruinando el hombro de su blusa; enterrando mi nariz en la curva de su cuello así no tenía que enfrentar mis responsabilidades, o el hecho de que el único amor verdadero de mi vida había sido un choque de trenes. No podría haberlo detenido si intentaba, había factores fuera de mi control. Harry y yo nos habíamos tropezado por la devastación con las mismas heridas espantosas.