─✿ my mom said she don't... → yoonmin

O2

―¿quién era la chica que entro con usted a casa anoche, hyung? ―abrazó con más fuerza al oso de  peluche -que su hyung le regalo por su cumpleaños pasado- entre sus brazos.

―nadie, jiminnie. ―ni siquiera apartó la mirada de la lata vacía de cerveza en el suelo frente a él.

―¿nadie? ―le observó por el rabillo del ojo y vio como yoongi negaba lentamente. apartó la mirada hacia el frente.― para no ser nadie era muy bonita. ―yoongi no respondió. así que jimin continuó.― para no ser nadie se veía muy alegre e impaciente por entrar a su casa, hyung. ―los ojos se le llenaron inevitablemente de lágrimas.― y para no ser nadie parecía ser alguien- ―se le ahogó la voz, su labio inferior tembló y un sollozo escapó de sus gruesos labios.

se aferró con más ahínco al peluche en sus brazos y ocultó su rostro en él.

―mirame, jiminnie. ―la voz de su hyung a su lado se escuchaba suave y llena de calma. más no obedeció y en su lugar se aferró al peluche con más fuerza aún, tanto que casi dolió.― jiminnie, mirame. ―esta vez las palabras fueron acompañadas de unas manos alejando al oso de peluche de su rostro y unos fríos dedos bajo su barbilla.― jiminnie abre los ojos. ―sintió como su hyung acariciaba sus mejillas, alejando las lágrimas de ellas.― por favor...

esta vez obedeció y cuando sus pequeños ojos se encontraron con los gatunos de su hyung, sintió la calidez que estos le ofrecían.

―no era nadie. ―sus delgados brazos le rodearon y jimin dejó salir las últimas lágrimas junto a una sonrisa adornando sus labios.