perfect student ; jimsu

four

‹ POV YOONGI ›

—¿Entendiste?

Pregunté el terminar de explicar un tema de química a Jimin.

—Sí, lo entendí. —asintió— ¿Así de fácil era?

—Sí, era más fácil que tu hermana.

—¿Por qué no me lo dijiste antes? —agarró su carpeta y comenzó a escribir— Si me lo explicabas de esa manera ya estaría terminando la tarea.

—Te lo expliqué como diez veces, no captaste y recién ahora lo entiendes, Jimin.

—Pero igual. —hizo un mohín y luego sonrió— Por fin entiendo algo en la vida, me merezco un compensación.

—¿Y?

—¿Me das un recompensa por entender química, Yoonie?

—No.

—Ortiva, quiero un beso.

—Deja de joderme.

—Me encantaría joderte de otra forma.

—Deja de molestar, Jimin. Haz la tarea.

—Yoongi, cumplí mis sanciones, entendí y me esforcé para subir mis notas, quiero algo a cambio...

—Esa es tu obligación. Y a parte, tienes mala conducta aún.

—Lo estoy solucionando.

—Entonces, cuando lo soluciones todo pídeme eso. —estornudé quitando mi vista hacia él para mirar hacia otro lado— Disculpa. —tosí.

Creo que el aire acondicionado me hace mal.

—¿Estás bien, Yoongi? ¿Estás resfriado?

—Creo que sí, sólo tengo mucho frío. —seguí con la lectura de mi libro.

—¿Tienes frío? Qué raro, yo pensé que no sentías frío, ya que eres el frío.

—También soy un humano, ¿sabías? —lo miré frunciendo el ceño. 

—Ni idea, yo creí que venías de otro mundo más perfecto.

—Deja de chamuyar. —contesté rodando mis ojos.

Dejó su bolígrafo sobre el libro del que estábamos leyendo, se acercó lentamente al lado mío y me abrazó de lado. Casi causándome un rubor en ambas mejillas, pero lo ignoré.

—Las personas dicen que soy un oso. —Jimin apretó más el abrazo, quedándonos muy aproximados uno a uno— Voy a intentar calentar tu frío cuerpo. —sonrió mostrando sus lindos dientes que me perdían. Joder, su sonrisa me perdía de tan hermosa que era, me causaba nervios y aún más pensar que esbozara aquella sonrisa por mí. 

—¿Y qué personas son? 

—¿Acaso estás celoso de quién he abrazado y poder decir eso, Yoonie? —abrevió mi nombre. 

—rodé mis ojos—Bue... Te deseo suerte. Calentarme es demasiado difícil. —sonreí sin mostrar mis dientas en conjunto de la respuesta.

Alzó una ceja, con tal vez doble sentido alguno.

—Eso sonó mal. —dije— Digo, que es difícil remover mi frialdad. —intenté rebobinar lo que había dicho, y lo mal que se ha oído. 

—Aw, eres como un pequeño copito de nieve, pálido y lindo; eres mi copo de nieve en mi mismo infierno. —sonrió y se movió hacia mí— ¿Ves?