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En lo que a mi respecta eres un cobarde, el más grande cobarde que he conocido. ¿Qué clase de persona enamora a otra cuando ni siquiera se preocupa por ella y luego la abandona como si nada hubiera pasado?
Hiciste conmigo lo que quisiste, me trataste como si fuera una mierda y me hiciste sentir las peores de mis tristezas y después de todo, ¿para qué? No es como que me hayas presumido como otra de tus conquistas. Estoy segura de algo, si me quisiste pero no se en que momento lo dejaste de hacer, solo me hubiera gustado que me hubieras dicho, así yo me hubiera ahorrado tanto dolor. Creo que te dio miedo el ver que alguien podía ver más allá que una simple cara, yo pude ver el brillo de tus ojos cuando hablas de lo que te gusta, yo pude escuchar tu verdadera risa, yo pude amarte por lo que realmente eres y creo que eso es lo que te dio miedo, el ver que alguien te puede hacerte débil, tuviste miedo de que te volvieran a lastimar, incluso cuando te dije que yo no lo haría. Todo eso es lo que te vuelve un cobarde.

Cartas que nunca enviaré Donde viven las historias. Descúbrelo ahora