Amor adolescente.

Capítulo 15

Mientras tanto Evan no podía dejar de mirar al estúpido con el que estaba Alisson. Era claro que Ian no iba a perder tiempo, en cuánto regresará iba a tratar de conquistar a su Alisson. Ian siempre fue un maldito mujeriego que salía con muchas chicas, aún recordaba a la linda Alisson de 12 años que siempre lloraba gracias a él. Y aún así él llegaba como si nada a coquetearle y tratar de conquistarla, si bien, antes Ian jamás le había echo caso a Alisson, ahora era obvio que no se podría resistir, si Alisson era la mujer más hermosa que existía en todo el mundo.

Y pese a saber, que quizá eso era lo mejor para todos, que Alisson lo olvidará definitivamente y se enamorará de otro, que se enamorará de alguien más...Evan no podía aceptarlo. Porque por más que lo intentaba no podía aceptarlo, aún no podía olvidar a Alisson, y la seguía amando como nada en su vida. No podía, por ningún motivo, siquiera imaginar a Alisson en brazos de otro, enamorada de otro, amando a otro. No podía, definitivamente no podía aceptar que Alisson pudiera olvidarle y dejar de amarle, y sobretodo no podía aceptar que Alisson pudiera ser feliz con alguien más, no cuándo él la seguía amando de esta manera.

Era un tanto egoísta o quizás era muy egoísta el pensar así, pero no podía pensar de otra manera, no podía aguantar sus ganas de levantarse y matar a Ian con sus propias manos y después llevarse a Alisson lejos de ahí. En cambio, Paula, sólo veía a Evan con un poco de pena. No llevaban más que algunas semanas de conocerse, sin embargo tenían una conexión tan fuerte y especial, y este ya le había contado toda la situación, y por lo tanto ella no sabía exactamente que hacer.

Quería hacer algo por esos dos, por Alisson y por Evan; porque se notaba a kilómetros que ambos se seguían amando y debían de estar juntos. Ella tenía en su poder las pruebas suficientes para demostrarle a Evan, que él y Alisson no eran hermanos. Sin embargo no podía hacer nada, por el momento no podía intervenir entre ellos y tenía que seguir soportando que aquellas personas tan importantes para Paula, siguieran sufriendo. Hasta que, cuándo llegará el momento, la bomba estallaría y pronto todo volvería a estar bien.

—Tienes que tranquilizarte Evan, ponerte así no solucionarán las cosas. —le regañó Paula, y Evan trató de contener sus impulsos.

—Es que no entiendes Paula... ¿Cómo hago para ya no sentirme así? Por favor, dímelo. —le exigió Evan desesperado y Paula suspiró.

—No lo se, pero creo que ya es hora de que la enfrentes. —respondió Paula, y Evan la miró como si se hubiera vuelto loca.

—Sabes perfectamente que no puedo Paula. —contestó Evan un poco afligido.

—Claro que puedes, y más ahora que se viene acercando. —a Evan le latió tan rápido el corazón que temio desmayarse en cualquier momento. Ahí venía Alisson, tan hermosa como la recordaba, aunque aún más preciosa. Él único problema es que venía agarrada del brazo con Ian, así que por más que lo intento no supo como reaccionar.

—Hola. —el primero en saludar fue Ian con una gran y hermosa sonrisa, a Paula le latió tan rápido el corazón sólo por ver tan cerca de si alguien tan jodidamente guapo como Ian.

—Hola. —respondieron Paula y Evan al unísono. Evan sin dejar de mirar a Alisson, Alisson sin dejar de mirar a Paula, Paula sin dejar de mirar a Ian...e Ian sintiéndose repentinamente incomodo, algo muy extraño en él.

—Veo que se la están pasando muy bien. —inquirió Alisson con un tono molesto que no fue desapercibido por nadie.

—No tanto como ustedes. —le respondió Evan de la misma manera. —También veo que no pierden el tiempo. —repuso aún más molesto y Alisson le sonrió falsamente.