Maldito Engaño

Once

Dedicaciones:
Torikun

La tarde estaba tranquila, un suave eco de las aves que pasaban cerca del lugar, una leve brisa de viento que provocaba que los árboles se movieran ligeramente, los minutos pasaban como horas para ambos jóvenes, estaban inquietos por que sonará el timbre que tanto esperaban.

Louis se encontraba en la clase de Historia y no le interesaba en lo más mínimo toda su mente estaba ocupada buscando a qué lugar llevaría al rizado esa tarde.

Por otro lado Harry se sentía un tanto nervioso, tal vez ese encuentro podría ser la oportunidad perfecta para decirle toda la verdad a Louis, pero algo dentro de él presentía que si este se enterara de eso quizás lo odie y era lo último que quería en el mundo.

Apenas sonó el timbre y Harry se exaltó, interrumpiendo en sus pensamientos. Tomó sus cosas rápidamente y se dirigió a la entrada de la escuela. A pocos metros de llegar a la puerta pudo distinguir al castaño viéndolo.

-Louis, ¿A dónde vamos?- mencionó un poco tímido

-¿Quieres un helado?-

-¡Sí! – Mostro una alegría en su rostro, el rizado amaba los helados.

Se dirigieron al auto de Louis, este presionó un botón haciendo que el coche se desbloqueara y pudieran abrir las puertas.

Ambos entraron y Harry lucía un poco nervioso, se colocaron el cinturón de seguridad y el castaño encendió el auto y la radio, cambio de emisora hasta que encontró una canción que le gustaba mucho y esperaba que al rizado le gustara.

Harry miraba a la ventana, estaba preocupado, debía llamar a su mamá y avisarle que llegaría un poco tarde a casa, pero sus pensamientos se vieron intervenidos por su canción favorita, "I Gotta Feeling - The Black Eyed Peas" miro a Louis con una gran sonrisa y este se encontraba cantando una parte de la canción

Tonight's the night, let's live it up,            I got my money, let's spend it up,        Go out and smash it like oh my God, Jump off that sofa, let's get, get off

Harry no se quiso quedar atrás y continúo la canción. Louis le subió más el volumen, lo que provocó que los dos cantaran a todo pulmón, adoraban esa canción.

I know that we'll have a ball,                   If we get down and go out and just lose it all, I feel stressed out, I wanna let it go, Let's go way out spaced out and losing all control

Entre risas y la melodía de la canción Electro-Pop, el ambiente era muy divertido. Louis empezaba a hacer muecas que hacían reír mucho a Harry, eran como sensación de ser infinitamente felices, sintiendo como si se hubieran conocido desde que nacieron, como si estuvieran predestinados a amarse con locura, rompiendo las leyes de la sociedad y la verdad es que nada de esto importaba, solo el saber que estaban bien y que podían amarse sin que nadie se entrometiera, Louis haría cualquier cosa por el chico bonito de ojos verdes del cual se había enamorado perdidamente.

Una vez que llegaron a su destino, bajaron del coche y lo estacionaron cerca del parque, se dirigieron a una Heladería que estaba a unas cuadras del parque.

-Harry, de pequeño adoraba venir aquí- Le dijo señalando el parque. -Venia y pasaba horas y horas sentado en ese árbol leyendo uno de los tantos libros que mi padre tenía en la estantería de la casa, o simplemente me sentaba y tomaba fotografías con la cámara que mi abuela me había regalado a los 8 años, y venía a este parque y sacaba fotos de los árboles, puestas de sol, niños jugando con sus padres... - Sintió un fuerte dolor en su pecho, recordó algo que no quería.

-Louis, ¿estás bien?- mencionó con un tono de preocupación.

-Sí – Llegaron a la Heladería, se pusieron en la fila para pedir su helado, era su turno y Louis pidió un helado de Chocolate con trozos de Galleta Oreo, Harry pidió lo mismo, solo que sabor de vainilla. El castaño se negó a que el rizado pagara, así que terminó pagando él.

Salieron del lugar y se dirigieron al parque, Harry estaba muy feliz, amaba los helados de vainilla, miró a Louis y este también parecía feliz.

-Vamos al árbol que mencionaste –dijo Harry mientras disfrutaba de su helado.

Sin prisa se situaron a centímetros del árbol y se sentaron en el suelo. Louis estaba muy feliz de estar con Harry, era la primera persona a la cual le revelaba este tipo de cosas sobre su infancia, ya que era muy reservado en ese aspecto.

-Louis, ¿Por qué Eleanor tiene que estar de "novia" contigo?- Esa pregunta tomó por sorpresa al castaño, provocando leves quejidos de tos.

-Pues... Harry, ella es hija de uno de los mayores empresarios de Londres, y al igual que yo, los padres de ella se reunieron con los míos y le ofrecieron unirse como empresas y familia, y este "noviazgo" beneficiara a ambas industrias –dijo luciendo muy serio, la idea no le agradaba estaba harto que sus padres controlaran su vida.

-Sabes Louis, a veces es necesario cambiar el rumbo de las cosas –dijo muy seguro de sí mismo, se acercó más a Louis y lo abrazo de sorpresa.

No tenía idea de cómo hacerlo, ni por qué lo dijo, pero algo seguro es que no dejaría que Eleanor enamore a Louis tan fácil, había luchado tanto por estar de esa manera con Louis, abrazarlo y decirle que las cosas estarían bien.

Pasaron un par de horas abrazados, conversando sobre diversos temas, desde el genial trabajo de la policía hasta las decenas de formas que tienen las nubes.

Deseaban conocerse más, sentir la confianza de una pareja aunque no lo sean oficialmente, el amor que sentían no se definía como un sentimiento en sí, ellos le daban sentido a esa palabra, una acción, un regalo, el simple hecho de pensarse o soñarse, porque no importaba sí estaban juntos y no tenían de que hablar, el silencio les era agradable en varias ocasiones de la vida y ellos lo comprendían a la perfección.

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¡Hey! Me tomo dos días en crear el capítulo, pero... prepárense por el gran drama que pronto se viene. 

Saludos al próximo comentario.

All the love. Sam~