Secreto de dos amigos (Scömìche Fanfic)

6. Sorpresas

*Corregido*

-Mitch-

Mi cabeza me está matando. Mi mente no me ha dejado dormir estos últimos días, parece una broma de mal gusto el hecho de que mi cerebro se ponga a trabajar al máximo en las noches y quiera descansar durante el día. Ya intente tomar todos los medicamentos posibles pero ninguno me ayuda, en serio necesi...

-¿Grassi?

-¿Qué?...

-¿Sabes la respuesta?

-Y-yo... ehh... ¿Seis?- dije mientras todos me miraban. Claramente no tenía idea de que estaban hablando ni en que clase estaba y mucho menos cual era la jodida respuesta.

-Joven Grassi, le pediré de favor que si no le gusta mi clase mejor no venga pero después no me ruegue por que le suba calificación. Y para su información estamos en literatura avanzada, no en matemáticas- finalizó el viejo cruzándose de brazos y mirándome enfadado.

-L-lo siento...

La campana sonó y sin dudarlo cogí mis cosas rápidamente y salí del aula a paso apresurado. No sabía exactamente a donde me dirigía, solo quería alejarme de la gente en los pasillos.

Llegué al fondo de un largo corredor y me metí en la primera aula que encontré abierta. Estaba oscuro y olía a cartón viejo, busqué el interruptor y prendí la luz para darme cuenta de que era el salón de archivo muerto. Se notaba que nadie había estado ahí desde hace mucho. Creo que ya encontré un pequeño refugio en casos de emergencia.

Me quedé allí por lo que parecieron horas, escuche la campana timbrar varias veces pero no le di importancia alguna, este era el único lugar que podía brindarme la paz que necesitaba. Claro que hay cierto rubio que también sabe cómo hacerme sentir tranquilo pero las cosas han estado algo tensas entre nosotros.

Ya hace aproximadamente un mes y medio desde aquella noche en la fiesta de bienvenida y le jure a Scott que nada cambiaría en nuestra amistad y así lo mantuve pero fue él el que cambió desde entonces. Las primeras semanas todo iba bien, seguíamos siendo como antes, nos reíamos, hacíamos bromas, incluso llegamos a ir a cenar un par de veces en citas dobles con Kirstie, Scott y alguna chica que llegaba a invitar. Pero hace un par de semanas note que el ya no quería salir tanto con nosotros y sus actitudes eran distantes, incluso habían noches en las que no llegaba al dormitorio y aparecía al día siguiente con grandes ojeras y oliendo a alcohol.

Incluso su rendimiento bajó bastante, tanto así que le han asignado un asesor el cual se supone que llegará en unos días.

Como sea...

Supongo que el cambio apenas le comienza a afectar; los primeros días aquí yo tardé bastante en adaptarme a eso de conocer gente y socializar y él estuvo para mi en cada momento, cuidando que no me diera algún ataque de pánico o que me desmayara apenas alguien se presentara conmigo. No se daba tiempo para si mismo, vaya...

Tal vez por estarme cuidando no se había puesto a pensar en que ya estaba en universidad y eso implicaba mucha más responsabilidad y madurez. Y ahora que, literal, ha estado apartado de todo y todos ha de estar pensándolo más tranquilamente.

Wow, saco conclusiones bastante rápido.

Por cierto, ¿qué hora es?

Miro mi reloj.

¡Mierda!

Olvidé por completo que hoy tenía una cena preparada para Kirstie y quede de pasar por ella.

Cojo todas mis cosas y salgo a paso apresurado de ese pequeño cuarto. El aire fresco golpea mi olfato. En serio alguien tiene que limpiar ese lugar.