Prologo

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La hierba verde floreció en marzo, orioles llenaron el cielo en abril. Estirándose más allá del mar oriental, el huerto de diez millas de flores de melocotón florecía espléndidamente. 

El clan de los cielos de Jiuchongtian y los zorros de nueve colas de Qingqiu pronto forjarían una alianza. Días y días pasaron en discusión entre los ancianos del clan. Entonces, un día temprano del año, después de doscientos veintitrés años de ardua deliberación, por fin todo se decidió. Justo a tiempo para la estación de flores de melocotón, la fecha cuidadosamente elegida cayó a finales de la primavera. 

Los dos individuos que finalmente se casaban después de un hechizo malogrado que abarcaba más de doscientos años no eran otros que el príncipe heredero Yehua de Jiuchongtian y la reina Bai Qian del reino de Qingqiu. 

El mundo había estado esperando desde hacía mucho tiempo para celebrar este evento. Siguiendo el estilo de Tianjun, las masas predijeron que habría una extravagancia sin precedentes en el feliz día de la pareja. Cada fachada debe ser grande, ya que no podían imaginar cómo Tianjun estaría haciendo hincapié en sus privilegios reales. 

Sin embargo, cuando la enorme procesión del novio emergió por la orilla del lago Wangsheng en el Monte Yuze para entrar en Qingqiu, Migu Xianjun que estaba esperando al otro lado del lago con una toalla en la mano pensó que tal vez había subestimado a Tianjun.

 La legión de la boda no era grandiosa; Era excesivamente grande. 

Migu Xianjun siempre había estado al lado de Bai Qian; En Qingqiu fue honrado con cierta reputación. Había una cosa o dos de las que él era naturalmente conocedor siendo un local de largo plazo en este reino. Como en la tradición celestial el novio no iba a venir por su propia esposa. Era un anciano que siempre llevaba esta responsabilidad.

Migu pensó que Mo Yuan podía ser considerado como el hermano mayor de Ye Hua. Siendo así, era perfectamente razonable que él, aunque era una divinidad de un gran y eminente clan, hubiera venido con el cortejo de la boda para recibir a la novia de su hermano. 

Y cuando una deidad eminente se embarca en un viaje debe haber una hada altamente clasificada, pero no muy bien clasificada. Parecía el hombre que estaba a cargo del destino de la humanidad, el que inhalaba tinta para comidas bajo el emperador del Polo Sur de Longevidad (El Imperio de Longevidad del Polo Sur es uno de los cuatro Ministerios Celestiales Daoistas) Siming Xingjun, había seguido. Esto también se consideró bastante razonable. 

En cuanto al dragón legendario delante de Siming, a quien solamente se podía atrapar la cola de todo el año; el tercer hijo de Tianjun, Liansong Shenjun, él era el tercer tío del príncipe heredero. Aunque parecía que no tenía ningún negocio aquí, uno no podía culparlo por venir para la festividad. 

Migu pasó media jornada reflexionando y había encontrado la causa de por qué estas tres deidades honorables las adornaban con su profundo aura. 

Pero el caballero de tunica púrpura y cabello blanco que estaba al lado de Moyuan, el renombrado eterno recluso, que si no como último recurso, no saldría fácilmente de Jiuchongtian, el que sólo apareció a veces en algunas pinturas, él que nunca se preocupo por la generación más joven, ¿por qué Dong Hua Dijun también formaba parte de la comitiva de la boda?

Migu sacudió su cerebro y todavía no podía llegar a una sola explicación. 

De pie en el otro lado del lago, incluso la buena vista de Migu estaba un poco borrosa. Fila tras fila de un aura providencial y ostentación se detuvo junto a la bahía de Yueya. La procesión no parecía querer cruzar el agua inmediatamente y acampar en la orilla del lago. El último grupo de jóvenes hadas ordenados salió y juntos prepararon refrescos para las deidades.

Tres Vidas Tres Mundos, El libro de AlmohadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora