Tres Vidas Tres Mundos, El libro de Almohada

Las Vidas de Bodhi Renacidas (Cap. 2)

Cuando Fengjiu era pequeña, sus padres habían querido construir un nido de amor solo para ellos, por lo que durante un largo período de tiempo fue arrojada al cuidado de su tía Bai Qian. Al crecer con ella, hizo de todo, desde atrapar pájaros en el cielo hasta pescar en el arroyo. Una vez, incluso le quitó todas las plumas al pájaro Jingwei (精衛鳥 – Jingwei as recorded in 山海經 Classic of Mountains and Seas fue originalmente la joven hija del emperador Yan Di que se ahogó en el Mar del Este y se reencarnó como un pájaro de pico blanco para arrojar ramitas y piedras al mar para llenarlo) de su cuarto tío mientras él dormía la siesta.

Teniendo en cuenta sus días de infancia aún más salvajes, Bai Qian hizo la vista gorda ante las travesuras de Fengjiu.

Sin embargo, su tía Bai Qian la crió con un entendimiento del bien común. Por ejemplo, Bai Qian le dijo una vez a Fengjiu que lo más importante de ser una deidad era ser cara dura, porque ser descarado también era una especie de coraje, ya que le permitía a uno dar el primer paso con valentía. Pase lo que pase, siempre que no tuviera miedo de la vergüenza y siguiera aguantando, tendría éxito a la larga.

Años más tarde, Fengjiu usó esta misma lógica para traspasar al pequeño Dough cuando lo alentó a luchar por los derechos del dormitorio de su madre contra su padre. "Lo más importante de ser inmortal es la desvergüenza. Mientras seas desvergonzado ... se puede hacer cualquier cosa ".

Por la noche, la pequeñ Dough repitió estos comentarios palabra por palabra a Bai Qian, preguntándole a su madre qué significaba exactamente ser desvergonzado, así como también cómo tener la cara dura como su padre. Bai Qian dejó el cuenco de sopa de loto que iba a llevar a Yehua como bocadillo nocturno, luego fue al estudio dentro del Palacio de Zhangsheng y eligió algunos paquetes de sutras budistas gruesos. Los empaquetó hasta el borde en un carrito de madera y, aprovechando las altas horas de la noche, los envió a la casa de Fengjiu. Ella añadió ociosamente una instrucción a su querida sobrina que si no terminaba de copiar todo para la próxima puesta del sol, una serie de citas a ciegas la estarían esperando desde el amanecer hasta el atardecer.

Fengjiu ya estaba a la deriva de la tierra de los sueños cuando la sirvienta de Bai Qian, Nainai, la despertó. Cuando abrió los ojos, vio los montones de sutras apilados frente a ella. Recordó que le había dicho algunas tonterías a Dough por la mañana, y ahora lloró un río de lágrimas de remordimiento.

Al día siguiente, al no poder terminar de copiar todas las escrituras, Fengjiu fue llevada al Jardín de la Luz de la Luna en el nivel 32 del Cielo.

El jardín de la luz de la luna estaba cubierto de árboles despreocupados; entre los altos dosel había innumerables flores extraordinarias. Aquí fue donde Daode Tianzun enseñó a sus estudiantes. (道德天尊 Daode Tianzun – mejor conocido como Taishang Laojun, el Tercer Puro de la Trinidad taoísta que gobierna el Reino de la Gran Pureza conocido como Taiqing)

Todos los jóvenes inmortales masculinos se reunieron en esta fiesta. Fengjiu barrió sus ojos y estimó que había alrededor de 100 personas presentes. Algunos estaban en conversaciones con sus colegas, otros miraban ansiosamente la entrada del jardín. Estaría bien si solo fueran un par de personas, o incluso cuatro o cinco, pero Fengjiu estaba abrumada al ver a docenas de ellos. Ella era audaz, pero incluso entonces dio un paso hacia atrás sobresaltada, y otro, y otro. Desde cerca, la voz de Bai Qian se elevó para decirle al asistente que estaba junto a ella: "Ah, creo que deberíamos atarla. Ella debe asistir a esta fiesta pase lo que pase. No debemos dejarla escapar a mitad de camino ".

El corazón de Fengjiu se agitó e inmediatamente se dio la vuelta y corrió.

Saltó para salir de ahí. La doncella la siguió de cerca, igualando sus pasos con ingenio con ingenio y coraje con coraje. Fengjiu tampoco supo cuándo comenzó a perderlos. Solo pudo darse cuenta cuando pasó el denso follaje de los árboles de Sal, cuando las ramas se sacudieron y los pétalos de color amarillo pálido cayeron sobre su cabello, detrás de ella, el sonido del viento que perseguía se había detenido.