Adolescentes Lectores: Nunca pierdas las esperanzas

Capitulo 4

"Okay. Te quiero, real and always mi dulce parabatai". Mis palabras me quedaron grabadas durnate toda la noche, inclusive soñé con ellas. "Real and always" era una frase que, con Nerea, habíamos inventado de nuestras 2 grandes obsesiones: Harry Potter y los Juegos del Hambre. "Real" pertenecía a una frase en la cual Peeta le decía a Katniss "You love me. Real or not real?", a la cual ella contesta "Real". Y "always" pertenece a la frase en la cual Dumbledore le dice a Sanpe "Afeter all this time?", y él responde "Always".

Era nuestra frase de siempre, la usábamos cuando nos decíamos que nos queríamos mucho. Era una frase muy mágica para mi y Nerea. Muy especial.

Todavía seguía pensando en Nerea cuando, por fin, decidí levantare de mi cama para ir a mi trabajo de verano. Ya eran cerca de las 9 cuando agarré una tostada recién salida del tostador, le puse mermelada de frutilla (mi favorita) y me prepare un buen cafe con leche en mi termo especial, Mi desayuno ya estaba listo, tomé mi bolso, saludé a mi madre y salé del depto.

"Otro nuevo día" dije por mis adentros mientras bajaba las escaleras y salía a la gris y húmeda mañana. Saqué mi celular y auriculares del bolso rojo, me acomodé todo y escuchaba la dulce voz de Ellie Goulding en "Anything could happen"mientras le daba un gran mordisco a la tostada y un buen sorbo a mi café.

Fue un día bastante tranquilo en la librería. La gente iba y venía, con o sin libros, se interesaba en algunos y otros quedaban olvidados. Pero lo mejor de todo fue cuando le conté a mi jefe acerca del instituto al cual iba a asistir.

-¿Seguro que no me estás tomando el pelo? - me decía él.

-Segurísima al 100% - reía yo.

-Entonces felicidades. Pero extrañaré tenerte aquí, la verdad que va a ser difícil poder susplantarte. - dijo, mientras caminaba al sector de literatura adulta.

A la que si la impresione mucho fue a Viri: casi la desmayo de la sorpresa.

-¿Encerio? ¿Lo juras? - decía casi sin respiración.

-Prometido.

-¡Que suertuda que eres! ¡Y te lo tienes bien merecido!

-Gracias, ojalá que vos tambien pudieras ir. Capaz de que los convenzca de que lean tu historias "5 minutos de verano".

-Eso seria casi inpagable - decía entusiasmada - ¿Pero, es cierto que hay materias extras de Los juegos del hambre?

Viri era una gran fanática de esta triología. Recuerdo que la invité a ver "En llamas" el último día que la daban (pero yo ya la habia visto 2 veces en el cine) y casi sale desmayada de ahí. Así comenzó a leer los libros, los cuales les encantó muchísimo, sobre todo el personaje de Peeta. Las dos éramos tributos muy fieles y leales.

-Muy cierto. Capaz que la elija entre mis 3 opciones... - le decía.

-¡Mas te vale que la elijas entre tus opciones y que me cuentes todo con lujo de detalles! - me gritaba mientras se reía. 

-De acuerdo, mujer - y también comensé a reirme.

-Me alegro de que puedas cumplir tu sueño. ¿Ya se lo contaste a las chicas?

Y ahí se me paralizó el corazón. Si bien ellas eran mis amigas, no tenía esa conexión que tenía con Viri, y mucho menos con la que tenía con Nerea: a ninguna le gustaba leer (a excepción de Anna  y algunas veces Mile). Eran mas bien las chicas que les gusta salir y divertirse, a cada lugar que van miran solamente a los chicos, y que estudiar es su menor preocupación.

Todavia mantenía relación con ellas, porque eran mis amigas y las quería muchísimo, pero era como si yo no encajara en su juego: odiaba las fiestas, odiaba ir a un lugar solo para mirar a los chicos, odiaba la música que ponían. ¿O era yo la que estaba desactualizada con el mundo? Capaz que era yo la rara. Sin embargo, aunque nos contabamos muchas cosas entre nosotras, esto no debía ser así.