Contra reloj

3

Ya estaba todo listo, solo faltaba que la espía estuviera lista, estaban los 3 vengadores algo nerviosos y ansiosos, lo que no contaban era que dos de sus enemigos estaban esperando también, lo que pasaba con su capitán los tenía sumamente ocupados y distraídos....no se estaban percatando de lo que sucedía ante sus ojos.

-bien Nat....ten presente que no puedes interactuar con nadie....o por lo menos no cambies nada...emmm....solo no cambies el pasado ¿si?-dijo Tony programando la máquina.

-bien...no cambiare nada-el castaño dejo de hacer lo que hacía y se acercó a ella.

-pero si lo haces, solo apreta este boton-dandole un dispositivo- y esa persona que te vea o le cambies la vida te olvidará, ella asintió y lo guardo. Todo estaba casi listo, Tony estaba programando la máquina para que la pelirroja llegara unas horas antes de que Steve se transformara en el capitán américa, el castaño estaba en ello cuando sintieron a dos hombres disparar y acercarse a la máquina, Bruce trataba de tranquilizarse mientras que iron man y la viuda negra se ponían en posición de ataque...uno de los hombres cruzó el umbral de la máquina mientras que otro sin dar la cara dijo.

-veremos cómo se las arreglan sin su capitán-y se fue, los dos vengadores no pudieron hacer nada, todo fue demasiado rápido...Tony vio la fecha en la que estaba la máquina e hilo todo en su mente.

-ellos quieren matar a Steve antes de que sea el capitán américa.-soltó nervioso

-pues los detendré antes-dijo Natasha con seguridad, Tony le paso un dispositivo y unas cuantas cosas que le servirán.

-te entregue el dispositivo con el que podrás volver....ya sabes que hacer Romanoff, salva al capi y tráenos un poco del suero y no permitas que esos idiotas le hagan algo, ella solo asintió y se adentro a la máquina.

-no permitiré que te hagan daño Rogers.

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Sintio un ligero dolor de cabeza y vio que estaba en una clase de callejon...todo se veia...antiguo, la maquina habia funcionado, miro a su alrededor e ispecciono las cosas que Stark le había dado, ahí vió una clase de vestimenta militar antigua, se escabullo en uno de los rincones y se adentro en una de las casas, gracias a Dios no había nadie, se cambió la ropa y salió....era un poco incomodo, le seria dificil patear traseros con esa vestimenta, camino por las calles tratando de encontrar algo que le diera una pista de donde podría estar Steve o esos tipos...sintió una clase de ruido parecido a una pelea proveniente de uno de los callejones, sigilosa fue a ver de qué se trataba, cuando ya estaba cerca vio cómo dos hombres iban sobre los techos...ellos debían ser los mismos que los atacaron en la torre, los iba a seguir pero escucho una voz conocida en dirección al callejón, se acercó a la voz cuando observó incrédula la escena.

-¿Steve?-susurro, sabía que en esta época Steve aún no era el capitán américa y era un tanto diferente, pero la diferencia era impactante...vio cómo unos sujetos lo golpeaban, eso le hirvió la sangre y decidió intervenir.

-oigan idiotas dejenlo en paz-soltó mirándolos fijamente

-vete de aqui preciosa, nos estamos encargando de este idiota-ella al ver a Steve con algo de sangre fluyendo de su labio la enojo aun mas, de un rápido movimiento golpeó a uno en el rostro mientras que al otro le golpeo el estomago...ambos sujetos estaban en el suelo

-larguense- exclamó, los sujetos salieron corriendo, ella volteo a ver a su rubio compañero y le sonrió.

-¿estás bien?-preguntó preocupada.

-si, gracias...soy Steve, Steve Rogers-trato de sonreír, la mirada del rubio no había cambiado en nada...seguía haciéndola divagar a penas lo veía...cuando sintió el carraspeo del chico noto que lo había estado mirando más de la cuenta.

-ah si...un gusto Steve...yo soy Natasha Romanoff-¡mierda!...su mirada la había confundido y había revelado su identidad sin haberlo prevenido

-un gusto Natasha-sonrió-de verdad gracias....ellos...

-no importa Steve...tienes el labio roto...¿tienes algo con que curarte?

-si..en mi casa

-bien, vamos-dijo la espía tomándole la mano, el rubio sorprendido se ruborizo...ninguna chica le había tomado la mano...menos una tan bella como aquella desconocida que lo había ayudado.

Caminaron por varios minutos hasta llegar a la casa del rubio, este comenzó a buscar sus llaves pero al parecer no tenía resultado.

-lo siento...dame un minuto-dijo buscando las dichosas llaves, la pelirroja recordó que Steve le había dicho que acostumbraba a esconder una copia de las llaves cerca de la puerta...visualizo el lugar, se agacho y la encontró.

-ten-exclamó entregandole la llave, el la miro confuso

-¿cómo?-frunció el ceño

-tu me dij...emmm yo siempre guardo una copia cerca de la puerta y pense que hacias lo mismo...suerte supongo-sonrió, el rubio no dijo nada solo abrió la puerta.

Al entrar ella se sentó mientras el ojiazul iba en busca del botiquín de primeros auxilios, al llegar la rusa le quito las cosas y comenzó a curarle el labio....el rubio estaba rojo, ella sonreía por ello...Steve no había cambiado nada. Al terminar, el la miro más detalladamente, era la chica más bella que jamás había visto.

-y dime Natasha...¿donde vives?-esa pregunta la tomó desprevenida

-emm, hasta el momento aun no encuentro un lugar...creo que...no lo se, ahi vere donde me quedaré-sonrió, el rubio analizó sus palabras, no podía permitir que una dama estuviera a estas horas buscando un lugar donde quedarse.

-puedes quedarte en mi casa si quieres, hay una habitación de invitados-la miro, ella le correspondió la mirada y sonrió.

-gracias Rogers...entonces creo que seremos compañeros de casa.