☆ T W E N T Y S E V E N ☆

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tyler.

"¡feliz cumpleaños!"

ni siquiera logré entrar completamente a mi casa, sophie estaba tirando confetti mientras soplaba un extraño silbato, y los demás estaban haciendo lo mismo.

"¡feliz cumpleaños, tío!, ¡sopla las velas y abre los regalos!"

reí por el entusiasmo de sophie, y cerré la puerta de la casa dejando mi mochila en el suelo para acercarme a la mesa donde se encontraba un gran pastel.

y todos comenzaron a cantar esa incómoda canción de cumpleaños, mi mamá se había acercado a mí para ponerme un gorrito de fiesta con una sonrisa.

había tenido doble fiesta, sin que yo me diera cuenta, patrick y los demás compraron un cupcake e hicieron un pequeño cumpleaños en el salón de historia, y pete había traído una vela y encendedor para que la fiesta se viese más real, según él había dicho.

patrick me regaló una muy bonita camisa, que estoy muy seguro me pondré seguido, pete me regaló acuarelas, y brendon una hermosa tarjeta de cumpleaños que al abrirla comienza a sonar una delicada canción.

como josh ya me había dado el regalo que tenía para mí, me besó toda la cara diecinueve veces.

creo que fue el momento más perfecto de mi vida.

luego de que el minuto más incómodo que había tenido acabara me inclino un poco a apagar las velas, y como era de esperarse alguien iba a llenarme la cara con crema, ese fue jay.

tenía crema del pastel en la nariz y en toda la mejilla, sophie también lo hizo, riendo como si aquello fuese lo más malvado que haya hecho en su corta vida.

de pronto tenía a todos dándome un abrazo. al principio literalmente no lograba ver nada, casi caía al suelo, pero como pude abracé a zack y a jay que eran los primeros que logré alcanzar.

"ya no eres un bebé" se burló jay, dándome un fuerte apretón antes de separarse.

"desde hace mucho dejé de serlo" sonreí.

"no importa, siempre serás mi bebé"

miré a mi mamá, y ella sólo me sonrió abrazándome de nuevo.

la abracé de vuelta procurando no mancharla con crema del pastel y miré a la puerta de la cocina. todo por ahora iba muy bien, hasta que me fijo en mi papá, él sólo está allí parado, cruzado de brazos y mirándome, aunque no se esfuerza en fingir una sonrisa al menos.

cuando mi mamá se separa de mí sonrío falsamente, no es que la fiesta no me haya gustado, sólo estoy un poco decepcionado al pensar que mi papá iría a venir donde mí, y decirme al menos un feliz cumpleaños.

me entregó un pedazo de papel para poder quitarme la crema de la cara, con su ayuda lo hice, y sophie comenzó a tirar de mi camisa para llamar mi atención.

"¡los regalos, los regalos!" exclamó sophie, sin dejar de soplar ese silbato.

"está bien, los regalos" sonreí, caminando detrás de ella para así poder abrir los regalos.

me arrepiento de haber tomado una cantidad demás de medicamentos, ahora mi cuerpo sólo pedía una cama y cuatro horas de sueño.

pensaba que si lo hacía, iba a durar más el efecto de esas pastillas, pero veo que sólo ha hecho que quiera dormir sin parar.

aunque, si no me las tomaba, estaría comportándome un poco infantil e iría a arruinar la hermosa fiesta que me organizaron.

me senté en el suelo al lado de sophie y me dio el primer regalo, era una bolsa de regalos, y según decía en la pequeña tarjeta era de mi mamá.

i'm sorry, i'm talkingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora