Mi querida aprendiz(springtrap x tu) #Sickfnafhs

Parte 4

Narra Ayato

Llevaba días sin ver a Saw, era extraño, la llamé varias veces pero ella no contestaba. Al llegar, llamé al timbre pero nadie contestaba, así que entré por un sitio secreto que ella y yo solo conocíamos. Al entrar revisé el piso de abajo, pero nada luego subí.

—¿Saw?¿Estás ahí? Si es una broma no es divertido —grité cansándome.

Entré a su habitación y vi: un charco de sangre, su ordenador tirado y una foto de al parecer el caníbal más buscado.

—Joder, porque vengo a por esta. Ahora podría estar echándome un polvo con Lauren, pero no tenía que venir con la guapa —pensé.

Salí de esa asquerosa casa y llamé a Joy, la mejor amiga de Saw, esa tía si que está buena.

—¿Hola? ¿Quién es?

—Soy yo Ayato.

—Oh, hola Ayato. ¿Qué pasa?

—¿Sabes dónde está Sawtrap?

—Mmh no, ¿Por qué? ¡¿Pasa algo?!

—Qué no sé donde está.

—Oh dios, oh dios, oh dios, oh dios. ¡¿Crees que le habrá cogido ese caníbal?!

—Vale, llama a todos sus amigos, quedamos en su casa.

—V–vale.

Colgué y chesqué la lengua.

—Esto es la guerra maldito caníbal. Ella es mía —pensé con odio.

Narra Sawtrap

Estaba aburrida en el salón de la cabaña. Resoplé y miré la ventana, estaba abierta. Pero sabía que alguien me vigilaba.

—Hola Saw —dijo Meg con alegría.

—Hola Meg, ¿Qué tal? —dije con una sonrisa.

—Mal, tengo que matar algo, o si no perderé el control.

—¿Q–Quiéres ir a m–matar algún a–animal? —pregunté con inseguridad.

—¿Harías eso por mí?

—C–claro para eso s–somos amigas.

—Iré a avisar a Spring. —me alegré por ella. Se le veía tan ilusionada. Suspiré y me levanté—. Sawtrap, si que te deja.

—Genial, voy a por la ropa.

—Ven que te doy yo ropa —dijo Meg con una sonrisa, una gran sonrisa.

—¡Sawtrap! Ten cuidado, si os cruzais Michelle o las gemelas H, corred, corred lo más que podáis que hay mucho loco por ahí—dijo Springtrap.

—Sí papá —dije en tono burlón.

—Toma llévate mi bate, cuídalo bien.

—Gracias Spring.

Meg y yo salimos de la cabaña y fuimos a por algún animal.

—¿Qué vamos a cazar? —pregunté.

—Un lobo.

—Ah bien....¡¿Espera, qué?!

—Sí, será divertido.

—Oye Meg, ¿A ti te gusta Springtrap?

—No, ya no —dijo seriamente—. Él me ha rechazado varias veces por ti.

—Oh, perdón.

—No pasa nada, ahora m–me gusta o–otro.

—¡¿En serio?! ¿Quién? —dije en un tono pervertido.