Mi ángel del infierno

Capítulo 2

Martes 2 de agosto: "Y si no pudieras despertar de ese sueño, ¿cómo sabrías que estás soñando?"

-Quiero saber quién eres, sin vueltas, sin más. Tan solo dímelo. 

-Estás preguntando de manera equivocada John, lo que tú anhelas saber es por qué soy yo...

-Por qué eres tú qué?

-Por qué soy yo, por qué no otra, por qué no dejo de hacer ruido en tu mente (dentro de ti). Por qué cada vez que me ves te desmoronas y cada vez que no lo haces duele. Puedo darte respuesta a todo eso, solo debes plantearte si estás listo para saberlo.

-No sé quién eres ni lo que has hecho, tampoco sé bien que palabras ofensivas pueden salir de tu boca, pero aún así algo dentro mio dice que lo estoy. QUIERO SABERLO - murmuré al mismo tiempo que tragaba saliva por demás, mis manos temblaban un poco e incluso mi rostro moría de calor pero sentía que era el momento, no estaba seguro de qué ... pero lo era.

Se acercó a mi de manera brusca, luego rosó mis labios como si fuera a romperme, como si estuviera echo de cristal. Me anonadaba tanta belleza, toda sí se veía más hermosa cada vez que se acercaba por centímetros a mi. Tomó con ambas manos mi cabeza y solo esbozó que lo sentía, ni una palabra más.

El sonido de la campana me despertó, no era cierto estaba volviéndome completamente loco. Soñaba con ella ¿qué era lo siguiente? ¿pedirle matrimonio?. Miré hacia mi derecha y allí se encontraba Finn, descostillándose de risa por mi sueño tan profundo - Al fin despertaste bella durmiente- agregó  in adecuadamente. Eramos amigos desde primer grado, aún así más de una vez me sobraban las ganas de dejarlo sin aire durante un par de minutos. 

-Eres un imbécil,  no estoy de chiste.

-Uouo veo que disney es algo mentiroso, no te sumiste en un sueño cálido y tranquilo. Se trata de una pesadilla no tío?.

-Es que no te cansas de ser irritante? . De echo sí, pero no puede volver a pasar. Voy a necesitar tu ayuda. Debes conseguirme un tiempo a solas con la chica misteriosa de los ojos azules.

-Estás de chiste?, pídele que salga contigo, no soy un chaperón. No es mi clase.

-Es más complicado que una cita Finn, puedes encargarte?- Asintió y se fue.

Dos horas más tarde logró conseguirlo, entré al salón y ahí se encontraba ella, muy centrada en lo suyo (demasiado) tanto que no notó mi presencia.

-Tú,quién eres? - Ataqué sin querer.

-Te parece esa forma de dirigirte a una dama? ... john - contraatacó de manera fría.

-Disculpa, es solo, como te llamas?

-Hayley, no es tan dificil ser amable cierto?- rió.

-Puedes decirme quien eres? por qué cada vez que te veo me desmorono y cada vez que no lo hago ...

- Duele - largó, como si supiera exactamente que iba a decirle.

-Parece que revivo esta escena, es ilógico.

-Quizás si lo viviste antes, en otra vida o incluso ¿puede que en un sueño?.

-Si, eso es, lo he visto en un sueño. Tú preguntabas si estaba listo pero al momento de decirme desperté..

-Y si no pudieras despertar de ese sueño, ¿cómo sabrías que estás soñando?.

La campana sonó y con ella desperté. -Al fin despertaste bella durmiente - esbozó Finn sentado a la derecha de mi. ¿Que diablos? ¿nuevamente? si que iba a ser un largo día.